A la izquierda, la variedad Raf, y a la derecha la Adora (Marc Casanovas)
Los productores alertan del fraude con uno de los tomates más codiciados del mercado: “Es como vender coches Peugeot a precios de Ferrari”
El tomate se encuentra todo el año, pero su temporada natural es el verano. Esta cantinela se expande como máxima indiscutible, pero es una verdad a medias porque hace referencia al sabor y no a la fecha de cultivo. Una de las variedades más codiciadas del mercado tiene la campaña de octubre a junio, y eso de verano tiene más bien poco. Es un tomate que reclama una tierra pobre, demanda un clima adverso sin lluvia y encuentra el equilibrio bebiendo de agua salina. La descripción precisa de Almería y la definición exacta deltomate Raf.
La fiebre por el oro rojo está disparando los precios y, de rebote, la posibilidad de un engaño casi imposible de detectar a ojos del consumidor. Cuando a principios del año 1967 se creó el primer tomate Raf, pocos podían pensar que su expansión sería meteórica. Como la mayoría de variedades contemporáneas, fue el resultado de un cruce de la ciencia. Un tomate de variedad Marmande (o Asurcado) y otra de tomate americano se unieron para dar forma al Raf, siglas de “Resistente A Fusarium”, que hace alusión a la resistencia a un tipo de hongo. Su cultivo implica una decisión crucial para el agricultor: sacrificar cantidad por calidad en busca de un producto gourmet. No en vano al tomate Raf también se lo denomina Pata Negra.
Agricultores como Jorge Lorenzo y Emília Molina , que empezaron a plantar tomates a los 16 años, han vivido en primera persona el auge de este tomate. “Llevo 35 años con mis tomates Raf. Antes no había invernaderos; se vendía todo en la calle”. Y en la calle esos primeros tomates Raf eran fáciles de reconocer. Se diferenciaban de otras variedades porque el Raf es un tomate irregular de color verde intenso; rojizo en la base con surcos profundos y aspecto acostillado. Su interior es carnoso con semillas muy pequeñas, y guarda su gran particularidad en el proceso de maduración, que es del interior al exterior.
El éxito de ventas trajo de la mano la aparición de copias con híbridos casi idénticos. Para Jorge Lorenzo “el problema no es hacer variedades parecidas. El problema está en el engaño sin el consentimiento del consumidor. Es como vender coches Peugeot a precios de Ferrari”. Por eso los esfuerzos de las cooperativas se concentran en combatir el cambiazo en el punto de venta. “Hace demasiados años que dura el engaño. Y pasa diariamente. Mucha competencia se ha enganchado al carro viendo el éxito del Raf”.
El Raf es un tomate irregular de color verde intenso; rojizo en la base con surcos profundos y aspecto acostillado. Su interior es carnoso con semillas muy pequeñas
Y es que la desprotección del tomate Raf es evidente porque no está registrado comercialmente ni existe un paraguas donde cobijarse en forma de Denominación de Origen. Por eso la mayoría de productores de tomate creen que la única solución pasa por el envase inviolable. “Con las cajas que vendíamos antes era muy fácil hacer el cambiazo. Cuando se acababa nuestro producto se podía añadir otra variedad y seguir vendiendo tomate como si fuera Raf a precio de oro”. Ya sea porque no hay suficiente oferta para tanta demanda o porque algunos están dispuestos a hacer negocio a costa del bolsillo del consumidor, la cruda realidad es que si alguien se atreve a vender la variedad de tomate Dumas como tomate Raf, lo más probable es que tenga éxito y se salga con la suya. Porque... ¿quién puede decir a ciencia cierta cuál de estos tomates no es Raf?
Evidentemente saben la respuesta en los mercados mayoristas especializados en venta al por mayor. Grandes cooperativas o centros como Mercabarna certifican que “es imposible engañar a los profesionales del sector. Nuestros técnicos detectarían cualquier anomalía aunque se modificara la etiqueta del tomate. El posible fraude se focaliza en el punto de venta con el consumidor”.
A día de hoy, comprar tomate Raf es jugar a la ruleta rusa porque hay riesgo evidente de ser engañado. Desplazarse hasta las entrañas de la gran cooperativa especializada en tomate de España es darse cuenta de la magnitud del problema. Miguel Va rgas, presidente de la cooperativa CASI, se atreve a poner cifras: “El 50% del tomateque sale a la venta como tomate Raf no lo es”. En esta cooperativa almeriense llegan cada día alrededor de 1 millón de kilos diarios de tomate recolectado el día anterior. Es en estas instalaciones donde 80 brokers nacionales e internacionales fijan el precio de más de 50 variedades de tomate. No es de extrañar que el Raf sea la partida más buscada porque se mueve en los 4 euros el kilo. Un precio que se dispara cuando llega al consumidor final hasta los 10 euros.
David Baños, director de marketing de la cooperativa CA SI, especializado en la venta de hortalizas y tomate, vende aquí su producto estrella. Es una voz autorizada para describir los rasgos diferenciadores del tomate Raf respecto a otras variedades. Resalta tres pruebas a diferentes niveles, que todo consumidor puede seguir ante la duda. “El precio suele ser un chivato muy importante. El tomate Raf bueno es imposible encontrarlo en el mercado entre 3 y 6 euros. Si ves alguna etiqueta con este precio, duda”.
Más allá de los números, Baños se adentra en aspectos físicos: “el tomate Raf tiene el cuello verde muy marcado. Es un tomate asurcado con la estrella bien marcada en el culo del tomate. No suele tener rayas atigradas de color verde en la parte inferior y el brillo es más intenso que en otras variedades”. Todo lo que no siga esta descripción puede ser un híbrido que intenta colarse en tu carro de la compra. Y si aún queda alguna duda, “al final lo mejor es probarlo. Si nos gusta compramos un kilo o lo que haga falta”.
En la restauración evidentemente el control también es muy riguroso. Josep Carbonell, chef ejecutivo del Grupo Pepa Tomate, asegura que “no tenemos constancia de ningún intento de engaño en nuestros restaurantes. Hay variedades muy parecidas, pero con el tomate Raf nos aseguramos que lleven el certificado de autenticidad, que es la manera más fiable de saber el origen del producto”. Y aporta una visión más mercantil: “la demanda de tomate Raf ha provocado que el mercado evolucione creando otras variedades autóctonas.
Pese a no ser la original, se ha cultivado en otras zonas para dar respuesta a las necesidades de los consumidores”. En la restauración asegura que es una cuestión de confianza con los proveedores: “trabajando con empresas con credibilidad y experiencia te aseguras la protección de los clientes ante un posible fraude”.
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