- El bitcoin sigue en más de 30.000 dólares y el ether por encima de los 2.000
- Las ganancias del ether en 2021 superan el 200% por el 28% del bitcoin
- Los múltiples usos prácticos que tendrá la red Ethereum la sitúan por delante
Ni el bitcoin ni el ether están atravesando sus mejores días. La 'montaña rusa' que está viviendo la principal criptomoneda por los vaivenes del CEO de Tesla, Elon Musk, las restricciones impuestas desde China y las críticas vertidas por el BCE ha contagiado a sus pares y el token de la red Ethereum también lo está pagando. Sin embargo, este halo de color rojo en las' criptos' no puede tapar un hecho indiscutible del que se venía hablando semanas atrás: la pujanza de Ethereum en contraste con la de un bitcoin más estancado.
Pese a las recientes caídas, el ether, token de la red Ethereum y segunda mayor criptomoneda en capitalización de mercado, mantiene unas ganancias de más del 220% en lo que va de 2021, mientras que las del bitcoin se quedan en un 28%. La opinión generalizada es que el bitcoin ha predominado como depósito de valor mientras la red Ethereum ofrece un amplio abanico de posibilidades y aplicaciones.
Los analistas de Goldman Sachs van aún más lejos y aseguran que esta red blockchain se convertirá en "el Amazon de la información", algo que le permitirá llegar a superar al bitcoin. "El ether parece el candidato más probable hoy en día para desbancar al bitcoin", concluyen. Ya el mes pasado un informe de JP Morgan auguraba el sorpasso del ether al bitcoin dada su mayor versatilidad. Recordemos que si el bitcoin se mueve ahora mismo por encima de los 30.000 dólares, el ether lo hace por encima de los 2.000.
En el último boletín de investigación de Goldman, centrado en el potencial de las criptodivisas como activos, los estrategas del banco de inversión Mikhail Sprogis y Jeff Currie dejan claro su expectativa de que el ether llegue a superar al bitcoin como depósito de valor: "Dada la importancia de los usos reales a la hora de determinar algo como un depósito de valor, el ether tiene muchas posibilidades de desbancar al bitcoin como reserva de valor digital dominante. El ecosistema de Ethereum admite contratos inteligentes y ofrece a los desarrolladores una forma de crear nuevas aplicaciones en su plataforma. La mayoría de las aplicaciones financieras descentralizadas (DeFi) se están construyendo en la red Ethereum, y la mayoría de los tokens no fungibles (NFT) emitidos hoy en día se compran utilizando ether. El mayor número de transacciones en ether frente a bitcoin refleja este dominio".
"A medida que el uso de la criptomoneda en los ámbitos DeFi y NFT se generalice, el ether construirá su propia ventaja de ser el primero en la criptotecnología aplicada. Ethereum también puede utilizarse para almacenar casi cualquier información de forma segura y privada en un libro de contabilidad descentralizado. Y esta información puede ser tokenizada y comercializada. Esto significa que la plataforma Ethereum tiene el potencial de convertirse en un gran mercado de información de confianza", añaden los dos analistas.
Es en este punto en el que surge la comparación con Amazon por parte de los dos expertos de Goldman: "El perfil digital de una persona podría contener datos personales como la propiedad de activos, el historial médico e incluso los derechos de propiedad intelectual. Dado que esta información es inmutable -no puede cambiarse sin consenso-, la información de confianza puede ser tokenizada y comercializada. Una plataforma de cadena de bloques como Ethereum podría convertirse en un gran mercado para los vendedores de información de confianza, como lo es hoy Amazon para los bienes de consumo".
Esta descentralización de la red Ethereum es lo que atrae a los inversores, como explicaba recientemente Phil Bonello, director de investigación de Grayscale Investments: "Los inversores suelen considerar a Ethereum como una inversión de crecimiento, haciendo una apuesta por el desarrollo continuo del ecosistema descentralizado construido sobre esa red blockchain".
Tanto Sprogis como Curie creen que esto es solo "un pequeño vistazo a sus usos prácticos reales" y ponen como ejemplo que "los individuos podrán almacenar y vender sus datos médicos a través de Ethereum a empresas de investigación farmacéutica". "Un perfil digital en Ethereum podría contener datos personales como la propiedad de activos, el historial médico e incluso los derechos de propiedad intelectual", señalan.
Ambos autores consideran que "muchos inversores ven ahora el bitcoin como una reserva de valor digital, comparable al oro, la vivienda o el buen vino. Pero todos los verdaderos almacenes de valor de la historia han proporcionado ingresos o utilidad, y el bitcoin actualmente no proporciona ningún ingreso y sólo una utilidad muy modesta". En su opinión, "a diferencia del bitcoin, otros criptoactivos tienen una clara justificación económica detrás de su creación". Además, remachan, "la ventaja del bitcoin como pionero también es frágil".
Desmontando esta fama de depósito de valor ideal por su limitada oferta, los dos economistas enfatizan que "es la demanda, y no la escasez, la que impulsa el éxito de los depósitos de valor". Ningún otro depósito de valor tiene una oferta fija. La oferta de oro ha crecido casi un 2% anual durante siglos, y ha seguido siendo un depósito de valor aceptado. Muchos elementos escasos, como el osmio (un metal precioso considerado el elemento natural más denso), no son reservas de valor", exponen como ejemplo.
También en menoscabo de la criptomoneda más célebre, los estrategas de Goldman apuntan que "la volatilidad del bitcoin se ha mantenido persistentemente alta, con una caída de los precios del 30% en un día sólo en esta última semana". "Es poco probable que esta volatilidad disminuya hasta que el bitcoin tenga un uso real y económico subyacente, independiente del precio, que suavice los periodos de presión de venta", vaticinan.
Más importante que tener una oferta limitada para preservar el valor, precisan los hombres de Goldman, "es tener un bajo riesgo de aumento dramático e impredecible de la nueva oferta". Y el ether, cuya oferta total no está limitada, pero sí su crecimiento anual, apostillan, cumple este criterio. Esto, junto al riesgo de que, en "un campo incipiente con una tecnología y unas preferencias de los consumidores cambiantes", como el de las criptomonedas, "las redes que no se adapten rápidamente podrían perder su liderazgo", arrojan una alta probabilidad de que "el bitcoin acabe perdiendo su corona como almacén digital de valor dominante en favor de otra criptodivisa con mayor uso práctico y agilidad tecnológica".
En otro de los 'talones de Aquiles' del bitcoin, como es el impacto medioambiental de su minado parece que el ether también le saca ventaja. "Ethereum está pasando de un método de verificación Proof of Work (PoW) a uno Proof of Stake (PoS). El Proof of Stake tiene la ventaja de aumentar drásticamente la eficiencia energética del sistema, ya que recompensa a los mineros en función de la cantidad de ether que decidan apostar, en lugar de su capacidad de procesamiento, lo que pondrá fin a la carrera de consumo de electricidad por las recompensas de los mineros", explican los estrategas de Goldman, que recuerdan que "el consumo de energía del bitcoin ya es del tamaño de los Países Bajos y podría duplicarse si los precios de bitcoin suben a 100.000 dólares", lo que provoca que la inversión en bitcoin sea "un reto desde el punto de vista ESG".