martes, 4 de noviembre de 2025

Musk busca un imposible: un viaje supersónico entre Nueva York y Londres en menos de una hora

 


  • Sería posible con trenes de levitación magnética y de trenes al vacío
  • El mayor obstáculo es geográfico: una cordillera volcánica en mitad del Océano Atlántico


Desde hace tres años que se hiciera con Twitter, tras una inversión de 44.000 millones de euros, la notoriedad de Elon Musk ha subido como la espuma, en parte por sus continuos delirios tecnológicos, empresariales y científicos. Uno de ellos, el hyperloop, un proyecto que contempla viajes a la velocidad del sonido como el futuro del transporte de pasajeros.

En 2013, el estadounidense ya mencionó el uso de este tipo de túneles de vacío que no confrontarían resistencia de aire por lo que podrían viajar a velocidades mucho más altas que las conocidas. En un primer momento, Musk junto a Tesla y Sapce X, contemplaron la idea de un transporte entre los Ángeles y la Bahía de San Francisco: un trayecto que, según cálculos, apenas duraría 35 minutos, en comparación con las 9 horas actuales que se tarda en transporte público (poco más de 6 horas en coche). Y aunque la viabilidad del diseño sería poco menos que una epopeya, desde entonces no ha habido grandes avances, más allá de algún prototipo a pequeña escala y en distancias muy cortas.

A cambio, y dado el 'fracaso' de Hyperloop, Musk apuesta ahora por el diseño de túneles submarinos para vehículo eléctricos; en concreto, especula con la posibilidad de un gran túnel que atraviese todo el Océano Atlántico y conecte las ciudades de Nueva York y Londres menos de 60 minutos a una velocidad 'supersónica' de 4.800 kilómetros por hora.

Tecnología magnética y túneles al vacío

Elon Musk, el dueño de X (antes Twitter) tiene un sueño: convertir en realidad cualquiera de sus proyectos, da igual si es colonizando Marte, enviando un coche Tesla al espacio o construyendo la red de transporte más rápido del mundo. En 2025, el tren más rápido del mundo es el Maglev Transrapid, en China, que alcanza los 430 km/h en su recorrido entre el aeropuerto de Pudong y la ciudad de Shanghái. Se trata de uno de los primeros ferrocarriles en utilizar tecnología magnética, la misma que pretende Musk para su proyecto de unir América con Europa.

No obstante, para poner en marcha el diseño, el magnate estadounidense debe combinar también la tecnología hyperloop: trenes al vacío que no confrontan ningún tipo de resistencia y 'vuelan' en velocidad. Si bien la idea implicaría un paso de gigante en el desarrollo de las infraestructuras ferroviarias y de servicios, además en un indudable avance paras las comunicaciones, en la práctica resulta casi imposible.



Implantar la tecnología hyperloop supone mantener un vacío perfectamente sellado en todos los vagones del tren y a lo largo de los miles y miles de los kilómetros que separan Nueva York con Londres. De llevarse a cabo sería la infraestructura más grande jamás construida, eso si es capaz de salvar la gran cordillera volcánica en forma de dorsal mesoatlántica que atraviesa el Atlántico, otro de los obstáculos para la viabilidad del proyecto