
Un hombre bebe agua de una botella de plástico.
ARCHIVO
"Es falso que estos envases se conviertan en botellas de plástico una y otra vez a través del reciclaje", afirma OCU.
El agua es la mejor solución para combatir la sed, sobre todo en verano. Los consumidores lo saben y por eso cuando las temperaturas aprietan se suelen disparar las ventas de agua embotellada. Estos envases suelen estar fabricados en la mayoría de los casos con plástico, un material barato pero que representa una amenaza para el medio ambiente debido a su persistencia, contaminación y acumulación en ecosistemas terrestres y marinos, sobre todo si son de un solo uso.
Por eso, las compañías que venden agua embotellada suelen indicar en su etiquetado que los envases son 100% reciclable o 100% reciclado para demostrar su compromiso con la sostenibilidad, algo que no es posible con total seguridad, advierte la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que ha denunciado greenwashing en el etiquetado de algunas marcas en sus envases de plástico, es decir: promocionan sus productos o servicios como respetuosos con el medio ambiente sin que haya una evidencia científica que lo avale.
"Los mensajes 100% reciclable o 100% reciclado que transmiten una idea de sostenibilidad ambiental en las botellas de plástico, no son 100% ciertos. Es falso que estas botellas se conviertan en botellas de plástico una y otra vez a través del reciclaje", asegura la OCU, que afirma que la tasa de reciclado de cuerpos de botellas de bebidas de plástico PET -el tipo plástico comúnmente utilizado en envases y botellas- es solo del 55% en la Unión Europea (UE) y que, de esta forma, la posibilidad de que vuelva a convertirse en botella ronda el 30%.
"La alegación 100% reciclable es ambigua y depende de muchos factores, como la infraestructura disponible para recolectar material, la efectividad del proceso de clasificación o los procesos de reciclaje adecuados", precisa la organización.
Por otro parte, el mensaje "100% reciclado implica erróneamente que toda la botella está hecha de materiales reciclados". Otros problemas son que "el tapón no siempre procede de material reciclado", como sucede con la etiqueta, y que es común agregar plástico virgen -no reciclado- al cuerpo de la botella.
Además, este colectivo también critica el uso de imágenes y dibujos relacionados con la naturaleza, habitual en la mayoría de los etiquetados de gran parte de las marcas de agua embotellada.
Denuncia ante la Comisión Europea
La Organización Europea de Consumidores (BEUC), grupo que aglutina a 45 organizaciones europeas de consumidores de 32 países, entre ellas la OCU, ya denunció en 2023 a los fabricantes de bebidas por afirmaciones comerciales engañosas sobre el reciclaje ante la Comisión Europea (CE) y ante la red de autoridades de protección al consumidor (CPC), pidiendo que se iniciase una investigación.
La denuncia se realizó a partir de la investigación llevada a cabo por organizaciones sin ánimo de lucro como ClientEarth y Environmental Coalition on Standards, entre otras, donde se pone de manifiesto que los mensaje 100% reciclable y 100% reciclado, junto a imágenes de temática ecológica en las botellas de agua, no se ajustan a la realidad.
Empresas comercializadoras de agua embotellada respondieron a las acusaciones emitiendo un comunicado en una declaración conjunta a través de las organizaciones Natural Mineral Waters Europe y UNESDA Soft Drinks Europe. "Desafortunadamente, las tasas de recogida de envases de bebidas a nivel de la UE se están estancando por debajo del 60% y el PET de las botellas recicladas a menudo se recicla para otras aplicaciones", reconocieron en su comunicado de prensa.
Agua del grifo, mejor y más barata
Desde la OCU, no obstante, se recomienda "priorizar el agua del grifo, salvo en casos de alertas por contaminación con nitratos o mal sabor, en cuyo caso aconseja comprar aguas minerales envasadas de manantiales situados en la misma región del consumidor", debido al menor impacto medioambiental que genera su transporte y a su mejor precio.
Para garantizar la seguridad en el consumo, "es importante conservarla en un ambiente fresco y seco, protegida de la luz solar, y una vez abierta debe beberse en dos o tres días".
Aun así, la organización advierte que "una familia de cuatro miembros donde se consuman 2 litros de agua mineral por persona al día a un coste de 0,17 €/litro -el precio que tendría adquiriéndola en garrafas de 5 litros- gasta 496 euros al año, frente a los 5,25 euros al año que gastaría bebiendo agua del grifo. Es decir, casi 100 veces más".
Noticia
29 ago 2025 - 07:24
F.P.
https://www.20minutos.es/lainformacion/consumo/greenwashing-botellas-agua-mensajes-son-100_5729507_0.html