domingo, 13 de marzo de 2022

Los peces que brillan en la oscuridad salen del acuario y empiezan a invadir los ríos brasileños


Peces 'glowfish' en un acuarioDanio Rerio



Los 'glofish' se detectaron por primera vez en 2015 en ríos del sureste del país y desde entonces iniciaron una conquista que en breve podría amenazar a las especies nativas.




Fueron modificados genéticamente para ser la mascota ideal: un vistoso pez de entre cuatro y cinco centímetros con franjas de colores verde, azul y rojo que brillan en la luz negra. Pero los peces cebra (Danio rerio) tan comunes en los acuarios están empezando a preocupar a los biólogos brasileños. Muchos de estos animales ya viven con total tranquilidad en los ríos del sureste de Brasil, anticipando un impacto en la cadena trófica que aún es difícil de prever.

Para empezar, la primera sorpresa es su capacidad de adaptación: que un animal transgénico se establezca de forma accidental en la naturaleza y continúe viviendo con normalidad no es habitual. En los ríos brasileños tienen pocos depredadores naturales, y además se reproducen todo el año y llegan a la madurez sexual antes que sus antepasados originarios de Asia. Es lo que revela un estudio publicado recientemente en Studies on Neotropical Fauna and Environment y reproducido en la revista Science.

El biólogo de la Universidad Federal de Paraná (sur de Brasil) Jean Vitule, explicó a la revista Science que una de las mayores preocupaciones es que los genes de la fluorescencia se trasladen a los peces nativos, lo que les haría más visibles a los depredadores. "Es un tema serio", dice sobre los también conocidos como 'glofish'. En Brasil, igual que en otros países, ya existe una prohibición para comercializar la especie, pero aun así muchos empresarios locales los siguen criando de forma ilegal para venderlos como mascotas.

El problema no es nuevo, pero se está agravando. En 2014 se detectaron por primera vez en estado salvaje en Florida (EEUU), pero su avance fue más o menos contenido. En Brasil encontraron un hábitat mucho más propicio para la expansión. Los primeros peces-cebra en la naturaleza los vio en Brasil en el año 2015 el biólogo de la Universidad Federal de São João del-Rei André Magalães.

Asegura que aparecieron en arroyos cercanos al centro de acuicultura ornamental más grande de Latinoamérica, en la ciudad de Muriaé, en el estado de Minas Gerais. Magalhães dice que seguramente escaparon de alguno de los 4.500 tanques del centro, que liberan agua en los ríos de alrededor. Dos años después del primer avistamiento, Magalhães y sus colegas empezaron a investigar cinco ríos en tres municipios diferentes y en todos ellos ya había presencia de los peces cebra transgénicos. Durante un año, cada dos meses recolectaron y midieron los animales y sus huevos y analizaron de qué se estaban alimentando. Según el estudio, están comiendo bastante bien: una dieta variada formada por zooplancton, algas e insectos nativos.

A partir del presunto accidente en Muriaé dominaron la cuenca del río Paraíba do Sul, que baña los estados de Río de Janeiro, São Paulo y Minas Gerais. Es la región donde predomina el bioma de la Mata Atlántica, un tipo de selva tropical con una biodiversidad comparable a la Amazonía y con un estado de salud extremadamente frágil por siglos de presión humana, ya que ésta también es la zona más poblada del país.

Los peces invasores empezaron por aquí su andadura en Brasil pero ahora ya están presentes en lagunas y riachuelos del sur y el noreste del país. El biólogo cree que las condiciones son óptimas para que la conquista continúe. "Están en las primeras etapas de invasión, con potencial para continuar", dice. Dentro de poco, pronostica, los peces cebra transgénicos podrían aumentar su población hasta tal punto de amenazar directamente a las especies locales, compitiendo por el alimento o aprovechándose de ellas.



JOAN ROYO GUAY
Río de Janeiro
Actualizado Jueves, 10 marzo 2022 - 09:11
https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/medio-ambiente/2022/03/10/622866f0fdddff565d8b4583.html