El canal de Panamá (EFE)
El presidente de Estados Unidos continúa generando tensiones internacionales con apenas dos meses de mandato
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha generado controversia al sugerir que su país podría reclamar el control del Canal de Panamá. Trump ha calificado las tarifas actuales de esta vía como "ridículas" y "exorbitantes", afirmando que estas perjudican a la Marina y las empresas estadounidenses.
Durante una publicación en Truth Social, Trump criticó el acuerdo firmado por Jimmy Carter y Omar Torrijos en 1977, que entregó el canal a Panamá en 1999. El expresidente acusó a Carter de regalar un "activo vital" para la economía y la seguridad de Estados Unidos, calificándolo como un gesto "tonto".
Trump destacó que el Canal de Panamá es crucial para el comercio mundial, ya que permite el tránsito de aproximadamente el 3 % del comercio global y asegura el despliegue rápido de la Armada estadounidense. Más del 70 % de los tránsitos están relacionados con puertos de Estados Unidos, lo que refuerza la importancia estratégica de esta vía, según el republicano.
La reacción desde Panamá no se ha hecho esperar. El presidente José Raúl Mulino ha declarado que "la soberanía de Panamá no es negociable" y ha instado a mantener una relación respetuosa con el gobierno estadounidense. Mulino recordó que los Tratados Torrijos-Carter garantizan la neutralidad y el acceso seguro al canal para todas las naciones.
China también ha respondido a las declaraciones de Trump, reafirmando su apoyo a la soberanía panameña sobre el canal. La portavoz Mao Ning subrayó que esta vía es una "gran creación del pueblo panameño" y que su país respetará su independencia, destacando la histórica relación de apoyo entre ambos países.
Además de mencionar el canal, Trump ha retomado su interés por Groenlandia, aludiendo a razones de seguridad nacional. En una publicación reciente, el presidente electo afirmó que Estados Unidos necesita Groenlandia para garantizar la "libertad global". Esta propuesta ya había sido rechazada durante su primer mandato.
El Canal de Panamá, construido por Estados Unidos e inaugurado en 1914, es un paso estratégico entre los océanos Atlántico y Pacífico. Su traspaso a Panamá en 1999 marcó un hito en la historia del país centroamericano, consolidando su control sobre esta infraestructura clave para el comercio mundial.
Las recientes declaraciones de Trump, a menos de un mes de asumir su segundo mandato, han encendido el debate sobre el futuro de esta vía. Mientras tanto, Panamá y otros actores internacionales se preparan para abordar cualquier intento de renegociación o presión por parte del gobierno estadounidense.