
- Era una capacidad que priorizaba a la hora de contratar a nuevos empleados
Steve Jobs es considerado como una de las mentes tecnológicas más influyentes del siglo XXI, el fundador de Apple es el responsable de un salto revolucionario en los dispositivos inteligentes, y todavía muchos años después de su muerte sus consejos y visiones del mundo siguen siendo un ejemplo para las generaciones venideras.
Gracias a él, hoy en día Apple es una de las empresas tecnológicas más respetadas, admiradas y exitosas en el mundo. Gran parte de todo ello se debe a que Jobs no era un jefe o incluso una persona común, sino que como aseguran sus compañeros de trabajo tenía una mente excepcional.
Pero el éxito de Apple no se le puede adjudicar únicamente a él, sino que durante los años que estuvo al frente, se contrataron a empleados que ayudaron a llevar a los más alto a la compañía de la manzana. Esto es porque a Jobs no solo le valía tener un currículum muy extenso o demostrar tener un coeficiente intelectual muy alto, el buscaba otras cosas (a parte de estas) a la hora de contratar.
El que fue CEO de Apple aseguró que el coeficiente intelectual es una capacidad secundaria para alcanzar las metas, y que lo que de verdad distingue a las personas que van a llegar al siguiente escalón. Según Steve Jobs, la verdadera inteligencia reside en la habilidad de mirar más allá de las dificultades inmediatas y de captar el panorama completo de cualquier situación.
"La inteligencia es como ver una ciudad desde el piso 80, porque mientras otros intentan descubrir cómo ir del punto A al B leyendo mapas absurdos, tú puedes ver todo", dijo el CEO en su discurso en la Academy of Achievement en 1982.
Más allá de la noción común de que una buena memoria implica mayor intelecto, el cofundador de Apple priorizaba en sus contrataciones a quienes podían tomar distancia de un problema para analizarlo desde un ángulo fresco. Jobs valoraba la capacidad de visión global y la perspectiva, ya que según él, ese enfoque permite hacer conexiones que parecen obvias, pero pasan inadvertidas para quienes solo siguen instrucciones.