viernes, 2 de agosto de 2024

Amazon, obligada a retirar 400.000 productos por su peligrosidad



Un repartidor de la empresa de comercio electrónico, Amazon. (EFE)



Pijamas para niños "inflamables", detectores de monóxido de carbono que "fallan en su alarma" y secadores "sin protección". Amazon ha sido declarado responsable de la venta de miles de productos defectuosos



Malas noticias para Amazon. La CPSC, la agencia gubernamental estadounidense encargada de ordenar a las empresas que retiren productos inseguros en el país, ha responsabilizado al gigante del comercio electrónico de la venta de 400.000 productos calificados como "inseguros", vendidos entre 2018 y 2021. Ahora la empresa de e-commerce deberá retirarlos del mercado o enfrentar consecuencias legales.

Amazon no advirtió adecuadamente de los graves riesgos, entre los que se encuentran la muerte y la electrocutación, de estos productos a los más de 300.000 clientes que los adquirieron. Entre los artículos se encuentran pijamas para niños que “no cumplían con los criterios de inflamabilidad aplicables”, detectores de monóxido de carbono que “fallan en su alarma” y secadores que "no tienen protección de inmersión".

La compañía, denunciada el 14 de julio de 2021, comunicó en enero que más del 60% de sus ventas provienen de vendedores independientes. La responsabilidad sobre los productos ha estado en tela de juicio durante años. Pero el martes, la CPSC lo señaló como responsable al considerarlo “distribuidor”, aunque los artículos fueran de terceros. Los comisionados de esta organización del gobierno fueron designados por el presidente Joe Biden.

“Amazon no informó al público sobre estos productos peligrosos y no tomó las medidas adecuadas para alentar a los clientes a devolverlos o deshacerse de ellos, dejándoles con altos riesgos de sufrir lesiones”, explica el comunicado. “Ahora debe desarrollar y presentar planes para informar a los compradores y al público sobre los peligros de sus productos, así como proporcionar reembolsos o reemplazarlos con otros artículos” cuando haya devoluciones o se demuestre que el producto está destruido.

Amazon retiró los 400.000 productos de su plataforma, pero la agencia marca que debe ir más allá. El plan incluye informes mensuales que demuestren que se está llevando a cabo la retirada de esos artículos, y probablemente una fotografía del artículo en sus mensajes de advertencia, tal y como establece la ley.


Años de discusión

El expresidente interino de CPSC señaló en una entrevista con la CNN en 2021 que “la votación de hoy para emprender acciones legales contra Amazon es un gran paso adelante para esta pequeña agencia”. De hecho, su reflexión iba más allá: “Debemos abordar la cuestión de cómo lidiar con estas plataformas masivas de terceros de manera más efectiva y cuál es la mejor manera de proteger a los consumidores estadounidenses que dependen de ellas”.

Amazon, durante estos años, se ha basado en un argumento que hizo ante un juez administrativo y la Comisión alegando que, según la Ley de Seguridad de Productos para el Consumidor, no se consideraba el distribuidor, sino un “proveedor logístico”. Pero, según analizó la CPSC y tras el fallo del juez a favor de la agencia, se ha elucidado que la compañía no proporciona solo logística, sino que es la “distribuidora” y, con ello, “controla todo el proceso de venta”.

Es más, en su momento no solo no retiró los productos, sino que envió mensajes a los clientes que, según la CPSC, “restaron importancia a la gravedad” de los riesgos. Estos mensajes señalaban que los productos “podrían no cumplir” los estándares federales, sin mencionar la “retirada del mercado”, desaconsejando explícitamente que los devolvieran y entregando una tarjeta de regalo sin exigir pruebas de la destrucción de los artículos, considerándolo una extralimitación. Estas prácticas, que no cumplían con las exigencias de la ley al no mostrar los riesgos reales, llevaron a la Comisión a concluir que Amazon “no hizo ningún esfuerzo”.

Un portavoz del gigante del e-commerce defiende lo contrario, tal y como le señaló a Ars Technica: “Tenemos pensado apelar la decisión y esperamos presentar nuestro caso ante los tribunales. Cuando la CPSC nos notificó inicialmente hace tres años sobre posibles problemas de seguridad con una pequeña cantidad de productos de terceros que eran el centro de esta demanda, notificamos rápidamente a los clientes, les indicamos que dejaran de usar los productos y les reembolsamos el dinero”.

Según el portavoz, Amazon respalda la seguridad de todos sus productos. “Contamos con medidas proactivas para evitar productos inseguros y monitoreamos continuamente los listados en nuestra tienda. Si descubrimos un producto inseguro disponible para la venta, abordamos el problema de inmediato y refinamos nuestros procesos”, declaró. Desde ahora, los clientes pueden estar al tanto de los retiros de productos de Amazon en una sección de alertas de seguridad específica en su sitio web.