En los últimos días internet ha visto la aparición de nuevas versiones de los navegadores de la red de la mano de Mozilla Firefox, Internet Explorer, Google Chrome y Opera, que muestran que la guerra por controlar este mercado se está intensificando.
El navegador es la puerta de entrada al mundo de la web.
Es un producto importante porque es a través de él que se accede a las páginas de internet y, dependiendo de lo que cada internauta utilice, la experiencia de navegación puede ser un gozo o una pesadilla.
No todas las páginas se ven igual o se disfrutan con la misma intensidad en estos programas.
En la actualidad, además, la competencia está más fuerte que nunca. De acuerdo con StatCounter, el Internet Explorer de Microsoft continúa siendo el líder con un 45,41% del mercado, seguido por Mozilla Firefox con 29,96% y Chrome con 17,11%, según cifras de este mes.
Pero su superioridad ha disminuido considerablemente. Hace dos años su mercado era superior al 60% contra el 31% de Firefox y un minúsculo 1,8% del recién lanzado Chrome. En 24 meses, Internet Explorer ha perdido más de 15% del mercado a costa de sus rivales, en particular de Google Chrome.
Gratis, pero con ganancias
¿Pero por qué empresas como Google, Microsoft y Apple invierten fuertes sumas de dinero en desarrollar navegadores que son gratuitos?
Aunque a simple vista no lo parezca, los navegadores son una importante fuente de ingresos para las compañías que los desarrollan y, sobre todo, para los gigantes de internet.
Para empresas como Apple, Google y Microsoft, estos programas representan una puerta de entrada a todos sus productos.
Windows tiene preinstalado el Interner Explorer -de ahí su ventaja competitiva en el mercado- y Mac OS X hace lo propio con Safari.
La principal estrategia de Chrome e Internet Explorer reside en utilizar como buscador principal el servicio de la casa: Google en el caso del primero y Bing en el del segundo.
De esta manera se aseguran que los usuarios llegarán a sus páginas, pasarán tiempo en ellas y generarán ingresos publicitarios.
Google extiende sus brazos más allá de Chrome. La empresa es una de las principales fuentes de ingreso de Mozilla (la organización sin fines de lucro detrás de Firefox) y de Opera (empresa responsable del buscador del mismo nombre).
Google acordó con ambas el pago de acuerdos millonarios para ser utilizado como el principal motor de búsqueda de ambos navegadores.
El buscador también cuenta con una versión de código abierto de su navegador, llamada Chromium, que ha permitido el lanzamiento de otros programas alternativos como RockMelt, que integran Facebook, Twitter y Google a la experiencia de navegación y dan más visitas al motor de búsqueda.
Mozilla, por su parte, es una organización que a pesar de no ser de lucro genera más de US$100 millones de ganancias al año gracias a sus acuerdos con terceras empresas.
"La mayoría de las ganancias de Mozilla continúan siendo generadas por la funcionalidad de búsqueda incluida en el producto Mozilla Firefox a través de organizaciones como Google, Yandex, Amazon, eBay y un puñado de otras empresas", dijo la organización en un informe público.
Opera, un navegador con poco margen del mercado pero al que se le considera como el más innovador de todos, también dice que sus ingresos provienen de convenios con terceros, de licencias para ser el buscador oficial en algunos teléfonos celulares y de su integración con algunos productos de Adobe.
La batalla será móvil
Pero la guerra de los navegadores está comenzando a abandonar las computadoras de escritorio para centrarse en los teléfonos celulares.
Cada vez más gente usa los dispositivos móviles para acceder a la web, y las empresas están llevando allá su batalla.
El sistema operativo Android, de Google, usa un navegador que comparte ciertas características de Chrome, pero que no es bautizado como tal. Eso, sin embargo, no significa que en el futuro cercano no lo incluya como el programa predeterminado.
Pero en Android también se puede utilizar Opera y Firefox, con lo que ambas empresas amplían sus terrenos.
En lo que a iOS -el sistema operativo del iPhone y el iPad- se refiere, Safari es el navegador predeterminado, lo que explica su modesto pero constante crecimiento. Opera también cuenta con una versión para los dispositivos de Apple, pero Firefox sólo tiene una aplicación para sincronizar favoritos e historial.
Internet Explorer Móvil es el programa predeterminado de los teléfonos Windows Phone 7 y sólo Opera planea una versión de su navegador para este sistema. Además, este navegador europeo está presente en teléfonos BlackBerry y Nokia.
El futuro de la navegación parece estar enfocándose en el terreno celular. Según StatCounter, las visitas a páginas de internet desde teléfonos celulares pasaron de 0,8% del mercado en marzo de 2009 a 4,60% en marzo de 2011.
La puerta de entrada a la red y la llave que representan los navegadores continuarán allí su batalla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.