TODOS SON IMPORTADOS POR VIAJEROS
Las condiciones climáticas caribeñas, con temperaturas muy estables por su situación geográfica, provocan que existan mosquitos transmisores –el aedes– durante los doce meses del año, por lo que el virus, sin acción directa del ser humano, no puede decrecer.
El chikungunya, un virus caribeño que se transmite a través de la picadura de un mosquito, ya ha registrado 39 casos en España. El gran brote que ha surgido en la zona de El Caribe junto al gran número de españoles que visitan la zona en vacaciones son el cóctel perfecto para que esta enfermedad, que hasta ahora producía pocos casos en España y todos ellos procedentes de África, tenga un mayor protagonismo en la Península que otros años.
Pero, ¿qué es el chikungunya? Esta enfermedad, cuyo nombre tiene origen y significado indígena –“el hombre que se retorcía de dolor”–, es similar al dengue o a la fiebre amarilla. Aunque no suele matar –sólo hay casuística en las personas más débiles, como ancianos, enfermos y niños–, tiene como principales síntomas unos fuertes dolores articulares, similares a los producidos por la artritis, y dolor de cabeza, además de fiebres superiores a los 40 grados. Los efectos no se manifiestan de forma inmediata, aparecen entre 7 y 10 días después de la infección.
El chikungunya puede durar entre 12 y 60 días, con la posibilidad de que produzca secuelas en forma de una continuación de dolor articular y cefaleas durante los dos años posteriores a la infección.
La enfermedad ha registrado un porcentaje muy bajo de fallecimientos en El Caribe: de 5.037 casos confirmados en las islas de Centroamérica, han muerto 21 personas. En España, no hay fallecidos.
La preocupación en el caso español reside, según Fernando de la Calle –doctor especializado en enfermedades tropicales del hospital La Paz-Carlos III–, en que aquí “hay un tipo de mosquito, el tigre, que es capaz de ser portador del virus”, aunque distingue el caso español del caribeño por razones climáticas: “En Italia, durante 2007, hubo un gran brote pero cuando llegó el frío los mosquitos murieron y el chikungunya desapareció”. Por ello, el doctor pide “tranquilidad” y cree que es positivo que exista “cierta alarma social, pero no catastrofista”.
El chikungunya en el Caribe
El caso caribeño sí preocupa, y mucho. Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la situación en las islas “es grave”. En países como República Dominicana, con 193.395 casos sospechosos, o Haití -51.830 posibles infectados-, existe una alerta creciente e importante. Según Luis Picas, testigo directo de lo que está ocurriendo en la zona, “la situación es preocupante y catastrófica”.
Otro hecho que confirma la situación caribeña es el estado de Puerto Rico, donde se ha declaradoel estado de epidemia tras registrarse 182 casos de chikungunya sin que se haya producido ninguna muerte.
Las condiciones climáticas caribeñas, con temperaturas muy estables por su situación geográfica, provocan que existan mosquitos transmisores –el aedes– durante los doce meses del año, por lo que el virus, sin acción directa del ser humano, no puede decrecer. Por ello, en algunas zonas concretas ya se está empleando la medida de fumigar para evitar una mayor propagación.
En el resto de países caribeños, la situación también es preocupante; en islas como Martinica (1.515 casos registrados), la Guayana Francesa (601 infectados) y Guadalupe (1.328 enfermos) se han registrado muchos casos desde diciembre de 2013, fecha en la que se descubrió el brote del chikungunya en el área.
Alerta mínima en España
Según el doctor Fernando de la Calle, la época de verano en España “es la más álgida porque la gente va a distintos sitios”, por lo que augura que “probablemente” lleguen más casos además de los 39 ya registrados.
Los motivos para creer que esto puede ser así es que “el mosquito que transmite la enfermedad, el tigre, está en toda la cuenca mediterránea” y porque “es un animal muy adaptado a vivir con humanos, no como el mosquito de la malaria, que está mucho más adaptado a las zonas rurales”.
El médico admite que “si el chikunguya entra como en Italia puede crear un brote” como el aparecido en 2007, que dejó cientos de afectados a su paso durante la época estival.
El procedimiento empleado en los hospitales es “establecer un control de los casos registrados”, aunque sólo de forma preventiva. Para la sanidad española, el caso no es tan grave “como el ébola, que sí tiene un dispositivo especial”. Además, recomienda a aquellos que muestren síntomas que “acudan a un centro especializado” en vez de ir a urgencias.
El doctor se muestra contrario a que se “restrinjan de viajar” debido a los pocos casos aparecidos en España, aunque sí considera que se deben seguir con rigurosidad una serie de medidas para evitar la picadura del mosquito. Desde el Ministerio de Sanidad recomiendan la utilización de repelentes de insectos, insecticidas y mosquiteras por las noches. Además, se aconseja a los viajeros que cojan la maleta rumbo al Caribe que eviten salir entre el anochecer y el amanecer, ya que es el periodo en el que estos animales pican con mayor frecuencia. En el caso de salir, lo mejor para evitar problemas es la utilización de ropa clara de manga larga, ya que las prendas oscuras atraen a los vectores.
http://www.elconfidencial.com/espana/2014-07-26/39-casos-en-espana-de-chikungunya-el-virus-del-hombre-que-se-retuerce-de-dolor_164655/4
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