Vista aérea de la finca en la exlcusiva isla Martha’s Vineyard. (Christiesrealestate)
Durante 40 años la familia Kennedy ha vivido alegrías y trágicas pérdidas en esta exclusiva isla estadounidense
La propiedad frente al mar, conocida como Red Gate Farm, en la isla Martha’s Vineyard, fue un santuario de retiro para la ex primera dama Jackie Kennedy Onassis y su familia durante más de 40 años. Caroline Kennedy, la hija, ha puesto a la venta la finca que su madre compró en 1978 por alrededor de 1 millón de dólares, y que ahora lista Christie´s International Real Estate por 65 millones.
El terreno en Aquinnah, Massachusetts, consta de 137 hectáreas de zonas verdes y una casa principal de unos 600 metros cuadrados que rebosan historia de la familia presidencial, pero que John F. Kennedy, asesinado en 1961, no llegó a disfrutar. La propiedad cuenta con más de 1,5 kilómetros de playa en el Océano Atlántico, piscina y construcciones independientes para invitados y servicio que la convierten en un lugar de ensueño. Pero no todo han sido idílicas vacaciones allí. En julio de 1999 frente a la costa de esta isla fallecía John Kennedy Jr. y su mujer, Carolyn Bessette, en un fatídico accidente de la avioneta.
Este fue la casa favorita de descanso de la glamurosa vida de la ex primera dama después de perder a su segundo marido, el magnate griego Aristóteles Onassis. Allí Jackie creó su propio mundo reformando la antigua granja de ovejas y poniéndola a disposición de su familia. Incluso hizo construir una casa de hadas en el jardín para sus nietos. “Esos nietos han crecido, así que ahora es el momento de seguir el ejemplo de mi madre y crear nuestros propios mundos. Estamos entusiasmados con el próximo capítulo de Red Gate Farm”, ha explicado Caroline en declaraciones a la reconocida inmobiliaria de alcance mundial que lleva la venta de la propiedad.
Según el Wall Street Journal, antes de comprar la finca privada, Jackie pasaba los veranos cerca de allí con su primer marido, John F. Kennedy, en el Kennedy Compound de la familia en Hyannis Port, Massachusetts. Los Obama también se dejaron seducir por los encantos de la isla Martha’s Vineyard pues disfrutaron varios años de veraneo allí.
La ex primera dama falleció en mayo de 1994 tras su batalla contra el linfoma no hodgkiniano. Desde su fallecimiento, esta residencia ha sido utilizada como casa de verano por sus hijos. “Hace cuarenta años, mi madre se enamoró de Martha’s Vineyard. Cuando encontró Red Gate Farm, fue una expresión perfecta de su espíritu romántico y aventurero “, ha contado su hija.
El edificio principal cuenta con espectaculares vistas a la costa desde cada una de las estancias excepto el salón. La casa principal para huéspedes, de dos pisos y cuatro habitaciones, fue concebida en 1980 por el arquitecto Hugh Newell Jacobson y reformada por Deborah Berke en el 2000. Cancha de tenis, una cabaña de caza, granero y huerto son otros elementos que conforman la finca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.