- Se trata de una práctica cada vez más extendida en EEUU
- Los analistas advierten sobre esta gran trampa de deuda
Comprar ahora y pagar después, una tendencia al alza entre los consumidores en Estados Unidos que, advierten los analistas, entraña enormes riesgos. ¿Por qué? Por las elevadas probabilidades de impago ante la falta de verificaciones de crédito y la opacidad de los informes de deuda, entre otras cosas.
Así lo advierte la agencia Fitch Ratings en un reciente informe, recogido por la CNBC, en el que subraya lo "opaca" que es la información sobre el rendimiento de la deuda del sector BNPL (acrónimo de la expresión en inglés Buy Now Pay Later, es decir, "compre ahora y pague después").
Fitch Ratings: "La deuda de la BNPL a menudo no es visible"
Según Fitch, muchos de los proveedores BNPL no informan del uso de estos servicios a las agencias de crédito. "En consecuencia, la deuda de la BNPL a menudo no es visible en el expediente de crédito y los prestatarios podrían tratar de obtener crédito de la BNPL de múltiples proveedores", señalan sus analistas.
"Los prestamistas (incluidos los que no son BNPL) podrían subestimar el nivel de deuda de un prestatario al suscribir una nueva deuda", insisten desde la agencia de calificación.
En el mismo sentido advierte Stephen Biggar, analista de Argus Research, al asegurar que los impagos en el sector son "uno de los principales riesgos". "Estas empresas no están haciendo ningún tipo de comprobación de los antecedentes crediticios" de sus usuarios, declaró la semana pasada a Squawk Box Asia de CNBC. "Durante una recesión, [dichos usuarios] pueden ser los primeros en comprar ahora y no pagar después", remarcó.
Un sector en el punto de mira
El sector del 'compre ahora y pague después' se encuentra bajo el foco de los expertos después de que la empresa de pagos digitales y servicios financieros creada por el estadounidense Jack Dorsey (cofundador de Twitter), Square, haya comprado Afterpay, una de las mayores empresas de BNPL, por 29.000 millones de dólares.
La firma australiana permite a sus usuarios pagar los productos que compren en cuatro plazos sin intereses y recibirlos inmediatamente. La mayor parte de sus ingresos procede de los comercios minoristas. Por ahora, Afterpay (fundada en 2014) no ha obtenido beneficios.
¿Cómo funcionan los pagos BNPL?
Los pagos a plazos no son nada nuevo. Los comercios los ofrecen desde hace décadas. Eso sí, hasta ahora solían usarse para pagar artículos de gran valor, como muebles, aparatos electrónicos o electrodomésticos, cuyo precio puede superar los cientos o incluso miles de euros.
En cambio, los últimos planes de 'compra ahora, paga después' se sitúan en un punto medio entre las tarjetas de crédito y los pagos a plazos. Se ofrecen para adquisiciones por internet que pueden ir desde tan solo 10 a 20 dólares (unos 12,5 euros) hasta miles, y van dirigidos especialmente a los usuario más jóvenes, explica la CNBC.
En Estados Unidos, la firma (o proovedor) más popular es Affirm. Esta y muchas otras del sector ofrecen ventajas que las tarjetas de crédito y los pagos a plazos tradicionales no ofrecen. Por ejemplo, a veces no cobran comisiones por demora y se caracterizan por la ausencia de comprobaciones de crédito (lo que permite al usuario acceder más fácilmente al pago aplazado). Eso sí, los costes del préstamo pueden dispararse si los consumidores no leen atentamente las condiciones, avisan los expertos.
Una 'bomba' de deuda
En su informe, los analistas de Fitch advierten de que las deudas contraída por los usuarios al 'comprar ahora y pagar después' se pueden acumular a la deuda de las tarjetas de crédito.
"Los usuarios de la BNPL podrían verse incapaces de hacer frente a los reembolsos periódicos y recurrir a las tarjetas de crédito o a otras formas de deuda con intereses elevados para pagar las deudas de la BNPL", afirma la agencia de rating.
Según el banco central de Estados Unidos, la Reserva Federal (Fed), la deuda de los hogares en el país aumentó en el segundo trimestre de 2021 en la mayor cantidad de los últimos 14 años. El incremento se debió principalmente al mercado de la vivienda, pero los saldos de las tarjetas de crédito también aumentaron en 17.000 millones de dólares con respecto a los tres primeros meses del año, hasta un total de 787.000 millones de dólares (671.330 millones de euros).
Una tendencia al alza
Pese a todo, los pagos a través de BNPL son una tendencia al alza en EEUU, la mayor potencia del planeta. Según calcula la empresa de la empresa de pagos Worldpay (y recoge Fitch Ratings), el volumen de pagos en comercio electrónico en el país realizados a través de BNPL creció a 19.000 millones de dólares (más de 16.204 millones de euros) el año pasado. La cifra es más del doble que la registrada en 2019, cuando el volumen fue de unos 9.500 millones de dólares.
Entre los proveedores más destacados en el sector BNPL norteamericano están la mencionada Affirm, además de Quadpay y Klarna. Pero también otras firmas financieras 'tradicionales' se han subido al carro: PayPal, Mastercard, American Express, Citi y JP Morgan Chase ofrecen productos de préstamo similares, mientras que Apple también está estudiando ofrecer este servicio, destaca la CNBC.