- Los datos de la expedición a Wuhan muestran que pudo haber más casos
- Para la próxima misión, puede ser clave el banco de sangre de la ciudad
El equipo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) enviado a Wuhan ha podido encontrar, tras semanas de misión, la primera pista sobre el origen de la pandemia de coronavirus: la enfermedad pudo estar mucho más extendida de lo que pensaba ya en el mes de diciembre...e incluso antes.
Según informa la CNN, los investigadores de la OMS han recabado nuevas pruebas que lo acreditan. El encargado de la investigación, Peter Ben Embarek, ha reconocido que su equipo ya posee 178 positivos en Wuhan y sus alrededores fechados en diciembre de 2019 y confirmados mediante pruebas de laboratorio y análisis clínicos.
Esto significa que, basándose en las estimaciones que cifran en aproximadamente un 15% los casos denominados graves, la enfermedad podría afectar, ya por entonces como mínimo, a unas 1.000 personas en aquella zona, considerada el epicentro de la pandemia.
Pero el problema no reside exactamente en la cantidad de casos, sino en otra clave: el equipo de la OMS ha encontrado hasta 13 secuencias diferentes del virus, lo que se conoce como variantes. Estas mutaciones se producen solo cuando el virus se encuentra circulando durante cierto tiempo.
De hecho, China proporcionó 92 posibles casos de covid (compatibles por los síntomas) entre octubre y noviembre en la región de Wuhan y la provincia de Hebei en la que se encuentra. Los 67 que aceptaron hacerse una prueba de anticuerpos dieron negativo en una prueba de anticuerpos realizada en enero, pero el actual desconocimiento sobre la inmunidad que da haber pasado la enfermedad y el largo tiempo pasado hasta la realización de la prueba (más de un año) no ayudan a resolver las dudas.
Estas piezas del puzle, así como la dispersión de los casos (que no se han dado en agrupaciones, sino en lugares bastante distanciados unos de otros), hacen sospechar a los investigadores que la transmisión en Wuhan y la provincia de Hebei pudo ser amplia antes de diciembre.
La OMS espera que las muestras del banco de sangre de Wuhan puedan arrojar más datos en la próxima visita
Ya de vuelta en los cuarteles generales de Ginebra, el equipo de la OMS pretende volver a viajar a Wuhan, donde les podría esperar una nueva pista que les acerque un poco más al origen del coronavirus: hasta 200.000 muestras del banco de sangre de Wuhan de los dos últimos años que no estaba disponibles durante esta primera visita y que, para el siguiente viaje de la expedición, podrían arrojar algo más de luz.
"Sería fantástico si pudiéramos con eso", sentencia Embarek, que reconoce no han sido las únicas muestras con las que no han podido contar: "Muchas muestras se descartaron después de algunos meses o semanas, dependiendo del propósito por el que se tomaron".