domingo, 4 de marzo de 2018

Cinco cosas que no debes tocar bajo ninguna circunstancia en los baños públicos

wall-3087292_1920.jpg


  • Cuando tenemos la necesidad de entrar a uno, estamos atentos de que nada nos toque la piel
  • La simple idea de sentarse en uno de los inodoros públicos es cualquier cosa menos agradabl

Cada vez que tenemos la necesidad de utilizar el baño en un bar, un cine o un centro comercial, estamos atentos de que nada nos roce la piel, imaginando que hordas de gérmenes y bacterias pueden atacarnos o ser perjudiciales para nuestra salud.
Los principales microorganismos que pueden encontrarse colonizando este tipo de hábitat son micrococos, estafilococos, estreptococos... La simple idea de sentarse en uno de los inodoros públicos es cualquier cosa menos agradable, ya que la gran mayoría de servicios están llenos de bacterias y gérmenes de completos desconocidos.
A continuación te presentamos cinco cosas que debes aplicar antes de volver a ir a entrar a un baño público y que te salvarán de muchos problemas de higiene.

La llave del lavamanos

Grifo. Imagen: Pixabay
Después de entrar al baño, es evidente que el siguiente paso a seguir sea lavarse las manos de manera óptima. A pesar de que nos lavamos las manos correctamente, se recogen los gérmenes en este procedimiento: abrimos la llave del grifo con las manos sucias y a continuación lo cerramos con las manos limpias.
Tras lavarse las manos, lo mejor es coger un papel del dispensador y usarlo para cerrar el grifo. De este modo las manos estarán limpias y no entrarán en contacto con los numerosos gérmenes y bacterias del lavamanos público.

El suelo

Baño público. Imagen: Pixabay
Este punto también es una obviedad, ya que para la mayoría de las personas es bastante difícil que lleguen a tocar el suelo del baño. Sin embargo, muchos de nosotros tenemos la mala costumbre de colocar el bolso o la mochila en el suelo mientras usamos el lavabo. Este tipo de accesorios absorben fácilmente bacterias y otros residuos del suelo. Si no hay un gancho en la puerta, se recomienda mantenerlo en el hombro o sostenerlo.

Cubrir la taza del váter con papel

Taza váter. Imagen: Pixabay
La piel actúa como barrera natural que nos protege de todo tipo de microorganismos infecciosos y, además, muchas de las bacterias que se encuentran en los asientos ya están presentes en nuestros cuerpos. El papel, por lo contrario, expone significativamente nuestra piel ante tales organismos de forma directa: las bacterias del papel higiénico se adhieren con más exactitud a nuestro cuerpo.

Tocar la manija de la puerta

Puertas baños públicos. Imagen: Pixabay
Cuando salgas de utilizar el váter, debes tener cuidado de los gérmenes con los cuales puedes entrar en contacto. Si bien te lavaste las manos, los demás pueden no haberlo hecho: todavía hay una cantidad significativa de gérmenes en la puerta y en la manija del baño. Lo mismo se aplica a la manilla de dentro del WC.
Considera la posibilidad de echarte un gel desinfectante después de tu uso del baño o usa un cuadrado de papel higiénico para abrir la puerta del váter. Quizá te parezca una actitud quisquillosa, pero después de todo el esfuerzo de lavarte las manos, debes seguir evitando el contacto con más gérmenes.

No bajar la tapa del váter

Váter. Imagen: Pixabay
Esta es otra de las medidas fundamentales para evitar la propagación de bacterias y que no siempre se aplican: bajar la tapa del váter una vez se haya hecho uso de él. En lo que se refiere, es mucho mejor tirar de la cadena una vez bajada la tapa porque, al revés, miles de bacterias salen disparadas al exterior.

ECODIARIO.ES        03/03/2018
http://ecodiario.eleconomista.es/viralplus/noticias/8977318/03/18/Cinco-cosas-que-no-debes-tocar-bajo-ninguna-circunstancia-en-los-banos-publicos.html?_ga=2.74923152.345271358.1519941296-1141881183.1511303610

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.