Elon Musk durante una conferencia en la base de SpaceX cerca de Boca Chica Village en el sur de Texas JIM WATSON AFP
El fundador y director ejecutivo de Tesla hizo coincidir sus aportaciones con la venta de 16.000 millones de dólares en títulos de la compañía
Elon Musk tiene el objetivo de donar a proyectos benéficos la mitad de su fortuna. Y aunque está aún lejos, el hombre más rico del mundo, fundador de Tesla y de la empresa de satélites Space X, donó más de 5 millones de acciones del fabricante de coches eléctricos en noviembre, según una presentación a la Comisión de Valores de EE UU (SEC). El valor de la donación fue de 5.700 millones de dólares (unos 5.000 millones de euros), según los precios medios de los días en que dio los títulos, y pudieron reportar al directivo un interesante beneficio fiscal. La presentación no nombra la organización a la que destinó los fondos.
El documento recoge que el empresario realizó cinco donaciones entre el 19 y el 29 de noviembre, de 5.044.000 acciones. La mayor de ellas fue de 2.234.000 de acciones y la menor de 250.000 acciones.
Las donaciones en cualquier caso servirían para aligerar su factura fiscal, ya que coincidieron en el tiempo con la venta por parte de Musk de 16.000 millones de dólares (14.100 millones de euros) en acciones de Tesla a final de año. Parte de esas ventas derivarían del ejercicio de casi 23 millones de opciones, que fueron el salario que recibió el directivo por parte de la compañía automovilística. Musk tuiteó entonces que pagaría más de 11.000 millones de dólares en impuestos.
Expertos fiscales consultados por Reuters señalan que el empresario pudo obtener una abultada ganancia fiscal si la donación fue en acciones de Tesla, ya que esa transferencia no estaría sujetas al impuesto sobre ganancias de capital, como sí lo estaría si se vendieran en el mercado. “Su beneficio fiscal sería enorme”, dijo Bob Lord, miembro del Instituto de Estudios Políticos. “Se ahorraría entre el 40% y el 50% de los 5.700 millones de dólares en impuestos, dependiendo de si puede aplicar la deducción contra sus ingresos de California y evitar el impuesto sobre las ganancias que tendría que pagar si vendiera las acciones”.
Lord añadió que Musk puede haber donado los títulos a intermediarios como los fondos específicos denominados Donor Advised Funds, vehículos desarrollados para canalizar aportaciones benéficas de empresarios, en lugar de destinar las aportaciones directamente a organizaciones sin ánimo de lucro.
Con una fortuna de 227.300 millones de dólares, Musk supera en más de 47.000 millones de dólares la riqueza de la segunda persona más rica del mundo, el fundador de Amazon, Jeff Bezos, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg. Gran parte del patrimonio de Musk está ligado a Tesla, que superó a Toyota Motor como el fabricante de automóviles de mayor capitalización del mundo en julio de 2020 y se unió en octubre al selecto grupo de empresas con valoraciones de un billón de dólares.
A medida que su fortuna ha crecido, Musk ha afrontado críticas por el pago de impuestos y sus escasas contribuciones benéficas. Una situación que puede haber cambiado, ya que Musk podría haberse convertido en el segundo mayor donante del mundo, por detrás de Bill y Melinda Gates, que donaron 15.000 millones de dólares, según The Wall Street Journal.
Musk, quien en 2012 se comprometió a entregar al menos la mitad de su fortuna a organizaciones benéficas, tiene una fundación a su nombre en la que hace donaciones, como las realizadas a la ciudad cercana a su plataforma espacial del sur de Texas, un concurso de 100 millones de dólares para la eliminación del carbono y una contribución de 5 millones a dos científicos que investigan el Covid 19.
CRÍTICAS A POLÍTICOS... Y A LA ONU
Patrimonio. El año pasado, siempre vía Twitter, Musk se volcó en críticas a políticos como Bernie Sanders y la senadora Elizabeth Warren por sus propuestas de un impuesto sobre la riqueza. “Tenemos que exigir que las personas extremadamente ricas paguen su parte justa. Y punto”, tuiteó Sanders. A lo que Elon Musk contestó con un ataque personal directo: “Se me olvida que sigues vivo”, señaló el polémico empresario.
Impuestos. Musk también tuvo enfrentamientos con la senadora Elizabeth Warren, quien exigió al empresario pagar más impuestos. “Cambiemos el código fiscal manipulado para que La Persona del Año pague realmente impuestos y deje de aprovecharse de todos los demás.”, escribió en su cuenta de Twitter la senadora de Massachusetts poco después de que la revista Time eligiera a Musk como la persona más destacada de 2021. “Deje de proyectar” contestó el empresario y acompañó el tuit con un artículo que calificaba a Warren de fraude.
Pobreza. La polémica también salpicó a la ONU. En noviembre, el director Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la Organización de las Naciones Unidas, David Beasley, instó al primer ejecutivo de Tesla a “salvar a 42 millones de personas de la inanición por solo 6.600 millones de dólares”. Musk respondió dudando de que esa donación fuera a resolver el problema de la pobreza en el mundo y recomendó al Programa Mundial de Alimentos hacer públicos los gastos de la organización y mejorar la transparencia.
CINCO DÍAS
15 FEB 2022 - 15:03 CET
https://cincodias.elpais.com/cincodias/2022/02/15/companias/1644933580_565205.html