lunes, 14 de febrero de 2022

¿Qué está pasando en la industria musical? Sting vende todas sus canciones por 300 millones

Sting, exlíder de The Police | Foto: Dreamstime


  • Se suma a una larga lista protagonizada por Bob Dylan, Neil Young o David Bowie



Sting, el exlíder de The Police y estrelle rutilante del pop británico, acaba de pasar a formar parte a un selecto grupo de artistas, aquellos que han vendido los derechos de sus canciones a una multinacional. La lista de personalidades que han llevado a cabo esta operación cada vez es más larga, incluyendo nombres como Bob Dylan, Neil Young, David Bowie, Taylor Swift o David Guetta.

El cantante del famoso grupo londinense ha vendido su catálogo completo a Universal Music Publishing Group, un conjunto de canciones que incluye éxitos del nivel de 'Every Little Thing She Does Is Magic', 'Every Breath You Take' o 'Roxanne'.

Unas composiciones que le han costado a Universal cerca de 300 millones de dólares, según las estimaciones de The New York Times. No es para menos, el cantante y batería que revolucionó el mundo del pop por accidente, dejando encendido un micrófono sin querer y creando el sonido de caja que marcaría la década de 1980, ha visto como grupos del nivel de Fall Out Boy han versionado sus canciones. Así como otros artistas como Juice WRLD, Kygo y Avicci han sampleado sus obras, una técnica basada en la apropiación de una pequeña parte de una canción para crear una nueva.

Por supuesto, estos artistas han generado millones de dólares para Sting en concepto de derechos de autor. Sin embargo, estos ingresos no parecen ser suficientes para todos estos artistas que han vendido sus catálogos pero, la pregunta es "¿por qué?".

¿Por qué las grandes estrellas de la música están vendiendo sus canciones?

Existen dos motivos para que estás estrellas de la música estén vendiendo los derechos de sus canciones a las majors: los impuestos y la pandemia.

Las altas tasas impositivas que rigen los grandes capitales de EEUU, donde generan sus ingresos la mayoría de grandes artistas, hacen que ingresar grandes sumas constantemente en derechos de autor suponga una gran factura.

Por este motivo, liberar todos estos derechos y obtener un solo pago multimillonario por todas ellas simplifica el proceso. Además, esta operación se convierte en una forma de asegurar el futuro, ya que las canciones podrían dejar de escucharse, por lo que dejarían de generar ingresos.

Por otro lado, aparece la pandemia. La crisis sanitaria ha provocado que los artistas hayan perdido su principal fuente de ingresos: los conciertos. Estos bolos suponen la mayor parte de la facturación de un músico en la mayoría de los casos, por lo que no poder llevarlos a cabo deriva en una drástica caída de los beneficios.

Estos dos aspectos son los que han motivado a todas estas personalidades del entertainment a vender los derechos de autor de todas sus canciones, asegurando liquidez y rentabilidad por su trabajo.

"Es absolutamente esencial para mí que el trabajo de mi carrera tenga un hogar donde sea valorado y respetado, no solo para conectarme con los fans de toda la vida de nuevas formas, sino también para presentar mis canciones a nuevas audiencias, músicos y generaciones", dijo Sting en un comunicado, tal y como recoge Forbes.