Con el Mundial de Fútbol de 2014 en el horizonte, muchos
estarán empezando a planificar su viaje a Brasil. Sin embargo, cuando se pongan
a mirar vuelos y hoteles, o a investigar el precio de los restaurantes, quizás
se lleven una desagradable sorpresa.
En los últimos años, el costo de la vida se ha disparado en Brasil, situando
a Sao Paulo y a Río de Janeiro entre las ciudades más caras del mundo, y se
espera que los precios se incrementen todavía más durante el torneo.
Esta realidad es motivo de preocupación para las autoridades brasileñas
encargadas de los preparativos del Mundial, quienes temen que los altos precios
dañen la imagen del país.
El lunes, por ejemplo, después de que un reporte en la prensa informara que
algunos vuelos domésticos durante el torneo eran diez veces más costosos que en
otras fechas, Flavio Dino, jefe de la oficina de turismo de Brasil (Embratur)
propuso poner un tope al valor de los vuelos durante el evento de la FIFA.
Dino también insistió en que hubiera un permiso especial para que compañías
aéreas extranjeras operen vuelos domésticos en Brasil durante la competencia,
algo actualmente prohibido.
Ambas sugerencias fueron rechazadas por el ministro de Aviación Civil,
Wellington Moreira Franco. Pero prometió pedirles a las compañías que reduzcan
sus precios hasta que estos alcancen "niveles razonables".
Precios mundialistas
Según el diario Folha de Sao Paulo, aquellos que quieran ver la
ceremonia de apertura del Mundial, el 12 de julio, tendrán que pagar US$1.095
por un vuelo de ida y vuelta desde Sao Paulo a Río. Un precio que casi iguala al
de un pasaje entre Sao Paulo y Nueva York.
En septiembre, BBC Brasil encontró ofertas de billetes de avión para esa
misma ruta que costaban una cuarta parte de ese valor.
Pero se espera que no sólo los billetes de avión sean más costosos durante la
competencia. Los precios de los hoteles también están experimentando fuertes
alzas de cara al Mundial, y los visitantes tendrán que estar preparados para
pagar hasta US$200 o más por quedarse en un hotel de dos estrellas en Río.
Hace dos meses, un estudio de Embratur afirmó que los precios de las
habitaciones de hotel acreditadas por Match, una organización designada
por la FIFA para gestionar el tema del alojamiento, serán hasta cinco veces más
altos durante el torneo.
El costo de los restaurantes, bares, estacionamientos y todo tipo de
servicios en las ciudades que serán sedes de los partidos también aumentará.
"Lo que probablemente sorprenderá al visitante procedente de Londres y de
otras capitales europeas es que por algunos servicios pagarán lo mismo que en
sus países, pero recibirán un pobre servicio por su dinero", afirma el
economista Samy Dana, profesor de la Fundación Getulio Vargas.
Dana explica que los elevados precios son el resultado de la especulación y
el oportunismo. "La gente ve el Mundial como una oportunidad de incrementar sus
ganancias durante un tiempo".
"Por otro lado", dice, "los visitantes experimentarán las consecuencias de un
problema local que ha afectado dramáticamente a las familias brasileñas en los
últimos años: el aumento del costo de la vida en el país".
Ciudades caras
El aumento de precios figura entre las mayores preocupaciones de los
brasileños que participaron en las protestas de junio, donde miles de personas
se manifestaron en las calles de distintas ciudades después de que se decidiera
un incremento de las tarifas de autobús.
Según el último estudio de la consultora Mercer sobre calidad de vida, Sao
Paulo ocupa actualmente el puesto número 19 en la lista de ciudades más caras
del mundo, por delante de Nueva York y tan sólo dos puestos por debajo de
Londres.
La inflación en Brasil se sitúa actualmente en 6%, pero los precios de
algunos productos, tales como alquileres y educación privada, han aumentado aún
más.
Otro ejemplo es que un estudio reciente llevado a cabo por la Conferencia de
las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad, por sus siglas en
inglés), observó que Brasil tiene una de las tarifas de telefonía fija y móvil
más altas del mundo, y algunos electrodomésticos y autos pueden costar el doble
que en Europa y Estados Unidos.
Según un anlaísis de precios y salarios del banco de inversiones UBS, para
comprar un iPhone los empleados de Río deben trabajar una media de 160 horas, en
comparación de las 43,5 horas de Londres.
Por lo que no es sorpresivo es que los brasileños vayan de compras al
exterior. Muchas parejas de clase media viajan a Miami o a Europa para adquirir
todo tipo de electrodomésticos cuando se casan, o productos para el bebé cuando
se va ampliar su familia.
Incluso con el reciente debilitamiento de la moneda nacional, el real, los
gastos de los brasileños que viajan al exterior alcanzaron los US$16.800
millones durante los primeros ocho meses del año, el mayor valor registrado
hasta el momento por el Banco Central en relación con el mismo periodo de años
previos.
Las razones
Analistas y economistas generalmente achacan este alza de precios a toda una
serie de factores.
El primero de de ellos es lo que los locales llaman "costos de Brasil", es
decir, los elevados costos operativos a la hora de hacer negocios en el país,
debido a la falta de infraestructura, una compleja burocracia y elevados
impuestos.
El aumento sustancial del valor del real en relación con otras monedas en la
última década también ha encarecido el precio de muchos productos y servicios en
dólares.
Por otra parte, a pesar de la reciente recesión económica, el mercado laboral
vive un buen momento, con índices de desempleo en niveles históricamente bajos,
lo que ha incrementado la demanda doméstica de todo tipo de productos y
servicios.
Finalmente, algunos analistas creen que los precios son altos porque las
empresas brasileñas están sobreprotegidas frente a la competencia
internacional.
"Las políticas ultraproteccionistas del país tienen como resultado que
compañías ineficientes son premiadas con mayores cuotas del mercado incluso
cuando no son competitivas según los estándares internacionales", expica
Dana.
Para el economista, todos estos factores son clave para entender por qué los
precios en Brasil probablemente sorprenderán a los visitantes durante el
Mundial.
"Los turistas y seguidores del fútbol tienen el consuelo de que van a
'sufrir' estos elevados precios sólo durante un mes. Mientras que los brasileños
tendrán que esperar un buen tiempo hasta que estos problemas se resuelvan y
puedan tener los precios correctos".
Costos en Brasil
- Habitación doble en hotel de 4 estrellas en Copacabana, Río de Janeiro: US$530.
- Asado tradicional brasileño (buffet libre): US$60.
- Tarifa de autobús: US$1,20
- Entrada turística para ver el Cristo Redentor en Río de Janeiro: US$20.
Ruth Costas y Renata Mendonça BBC Brasil Última actualización: Jueves, 17 de octubre de 2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.