El motor de búsqueda de Alphabet, Google, ha sido esencialmente intocable durante más de dos décadas, pero un puñado de empresas, algunas fundadas por ex empleados de Google, están a punto de cuestionar su hegemonía. El ChatGPT abre la puerta a un cambio del modelo, que actualmente está basado en palabras clave, a uno impulsado por modelos de lenguaje, que analizan enormes bases de datos de texto para desarrollar la capacidad de comprender las preguntas de los usuarios y producir respuestas directas. Esta es la tecnología que usa ChatGPT para componer sus respuestas rápidas.
En sus primeras semanas, ChatGPT, la popular herramienta de inteligencia artificial de OpenAI, ha ofrecido un nuevo modelo potencial para la búsqueda en línea. El chatbot responde a preguntas sobre temas de ciencias políticas y programación informática con explicaciones detalladas, y su formato de preguntas y respuestas significa que los usuarios pueden profundizar hasta que comprendan por completo. Los usuarios que realizan investigaciones similares en Google normalmente deben escanear los resultados de búsqueda y examinar varios sitios web hasta llegar a sus propias conclusiones. ChatGPT, por el contrario, ofrece una respuesta definitiva (o al menos que suena a definitiva y fiable) en segundos.
Algunos de los avances tecnológicos que sustentan los grandes modelos lingüísticos de inteligencia artificial (IA) se forjaron en los propios laboratorios de investigación de Google. Pero los empresarios que se han ido en los últimos años dicen que la empresa puede tener dificultades para capitalizar completamente el potencial de la tecnología, en gran parte porque su modelo de negocio, en el que los anuncios se muestran junto con los resultados de búsqueda, es demasiado lucrativo para cambiarlo. Google registró 54.480 millones de dólares en ingresos publicitarios en el trimestre más reciente, lo que representa el 78,9% de sus ventas brutas. Los anuncios son su mayor fuente de ingresos con mucha diferencia.
"Google es simplemente una víctima de su propio éxito", dice Sridhar Ramaswamy, una vez el principal ejecutivo publicitario de Google, quien ahora es director ejecutivo de Neeva, un motor de búsqueda más sensible a la privacidad. "Están atrapados hasta cierto punto en cómo son y cómo se proyectan", explica a Bloomberg. Lo cierto es que Google todavía se mantiene a un nivel superior. ChatGPT y otros modelos de lenguaje a menudo brindan información incorrecta de manera convincente, un fenómeno al que los científicos informáticos a veces se refieren como "hallucinating", en un juego de palabras para referirse a la alucinación y fallo informático. A diferencia de una búsqueda en Google, ChatGPT actualmente no ofrece ningún dato sobre la fuente de información que proporciona a los usuarios, y OpenAI reconoce que a veces produce respuestas incorrectas. Google puede dirigir a los usuarios a sitios que promueven información errónea, pero no asume la respuesta errónea en primera persona, al final el usuario termina en la fuente.
Por puntos débiles de ChatGPT
Desde OpenAI explican que ChatGPT no incorpora datos de Internet en sus respuestas, y agrega que la versión actual sirve para ayudar a desarrollar modelos que son "más seguros, más confiables, alineados y más útiles". Las respuestas no están destinadas para ser usadas como consejo.
Google introdujo su motor de búsqueda en 1998, impulsado por su algoritmo característico PageRank, que medía la importancia de cada sitio web por las formas en que otros sitios se vinculaban a él. Rápidamente se convirtió en la herramienta de búsqueda dominante. Google ha pasado décadas indexando la web, y la amplitud de consultas que puede responder es inigualable. ChatGPT, por el contrario, está entrenado en un conjunto de datos que contiene solo información limitada después de 2021. Su conocimiento está congelado desde ese año. En los últimos años, Google ha tomado medidas para ayudar a los usuarios a realizar búsquedas en nuevos formatos, incluso a través de la cámara de un teléfono o utilizando imágenes y texto de forma combinada. Utiliza grandes modelos de lenguaje para comprender las consultas de los usuarios y también ha incorporado la tecnología de "fragmentos destacados".
Una empresa como Google, con acceso a una gran cantidad de datos y recursos informáticos, parecería ser un lugar ideal para realizar desarrollo de lenguaje de la IA. Sin embargo, los ingenieros a menudo quieren moverse más rápido de lo que pueden una empresa tan grande, y Google ha visto muchas salidas de sus investigadores más brillantes. Una de las contribuciones más influyentes del gigante tecnológico al campo fue el documento de 2017 " La atención es todo lo que necesita ", que introdujosistemas que ayudan a los modelos de IA a concentrarse en las piezas de información más importantes entre todos los datos analizados. De los ocho autores del artículo, todos menos uno han saltado a nuevas empresas en los últimos años, según muestra una revisión de los perfiles de LinkedIn; al menos cinco han fundado sus propias empresas de IA. Cuando se le preguntó por qué abrazó la oportunidad de emprender, un autor, El fundador de Character.AI , Noam Shazeer, lo dice sin rodeos: "Las empresas emergentes pueden moverse más rápido y lanzar antes sus productos".
Los observadores de la industria describen la amenaza de los lenguajes de IA para Google como algo que va desde preocupante hasta existencial. En una nota a los inversores en diciembre, Morgan Stanley reconoció la posibilidad de que los usuarios pudieran usar programas de IA para consultas como reseñas de productos y viajes. Paul Buchheit, el exempleado de Google que creó Gmail, escribió en una serie de publicaciones en Twitter que la empresa podría estar "a solo uno o dos años de sufrir una disrupción total".
Sin embargo, alrededor de dos tercios de las búsquedas de Google terminan sin que los usuarios hagan clic en otro sitio, según la firma de investigación de mercado SparkToro y la firma de análisis Similarweb. Eso sugiere que es posible que Google simplemente necesite modificar su interfaz para dar lo que necesita un usuario, dice Mandeep Singh, analista de Bloomberg Intelligence. "Google tiene una fuente de conocimiento muy profunda, para que su negocio se vea afectado", comenta.
Eso no ha impedido que las nuevas empresas lo intenten. Con muchas más herramientas de IA comerciales y de código abierto disponibles, las barreras de entrada han caído, dice Edwin Chen, fundador de Surge AI, una plataforma de etiquetado de datos que trabaja con empresas emergentes de búsqueda. Su empresa ha llevado a cabo una investigación de consumo que muestra que los usuarios suelen preferir los resultados de búsqueda de los participantes más nuevos, como Neeva, You.com y Kagi , en particular para consultas como recetas de cocina. "No necesitas cientos de millones de dólares para vencer a Google", dice.
Las nuevas empresas de búsqueda han adoptado una variedad de modelos de negocios. Vectara, fundada por ex empleados de Google, está vendiendo su software a las empresas, para explotar motores de búsqueda. Dichos modelos requieren un gran poder de programación, pero Vectara utiliza modelos de lenguaje para procesar texto de forma más barata y generar respuestas.
Kagi, Neeva y otros motores de búsqueda para consumidores se basan en suscripciones y ofrecen a los usuarios búsquedas ilimitadas por una tarifa mensual. Neeva usa sus recursos informáticos de manera eficiente, dice Ramaswamy, quien pasó 15 años en Google antes de cofundar la empresa en 2019. El ejecutivo dice que todavía ve un gran valor en el modelo heredado de búsqueda, pero trabaja con modelos de lenguaje en su motor de búsqueda y planea lanzar productos basados en esta tecnología. También planea usar los modelos para redactar "documentos de una página" que revelen las fuentes, para que los usuarios puedan evaluar la credibilidad de la respuesta. "Estamos pensando mucho en cómo podemos tener lo mejor de ambos mundos", explica Ramaswamy.
La opción de Google
Character.AI de Shazeer puede ofrecer otro modelo de búsqueda. Fundó la empresa con Daniel De Freitas, quien dirigió el trabajo de Google en el chatbot pionera LaMDA, que Google anunció por primera vez en mayo de 2021. En septiembre, Character.AI presentó un sitio con un elenco diverso de personajes de chatbot con los que los usuarios pueden conversar en tiempo real. Todo impulsado por grandes modelos de lenguaje. El sitio incluye descargos de responsabilidad: "Recuerde: ¡Todo lo que dicen los personajes está inventado!", lo que ofrece cierta cobertura si los chatbots dicen falsedades. "Ahora podemos hacer algo extremadamente valioso, que es aportar diversión y apoyo a ayudar a las personas a sentirse mejor", apunta Shazeer. "Pero eso es realmente solo la punta del iceberg".
Google continúa puliendo internamente LaMDA y otros grandes modelos de lenguaje, y su posición dominante le da el lujo de ser paciente. Pero ya hay al menos un argumento poderoso para darse un poco de prisa. ChatGPT ya está lanzado y aprendiendo sobre la marcha.
"Uno nunca debe subestimar a Google", dice Oren Etzioni, asesor y miembro de la junta del Instituto Allen de inteligencia artificial. "Pero el desafío que tienen es que GPT está aprendiendo sobre la marcha".
