viernes, 22 de enero de 2021

El mayor vertedero marino del mundo está en el Mediterráneo


Una bolsa de plástico, en la fosa de Calipso, el punto más profundo del Mediterráneo. (Caladan Oceanic)



En el estrecho de Mesina, podemos encontrar millones de restos de basura. Los desechos del ser humano están llenando los mares y océanos



Tal vez no seamos conscientes. Cuando veraneamos en las playas españolas, salvo en casos extraordinarios, podemos disfrutar de arenas y aguas limpias. Sí, de vez en cuando tenemos la mala suerte de encontrarnos con algún resto de basura que no debería estar allí. Podemos culpabilizar de su presencia a algún individuo incívico, pero su relevancia desde un punto de vista global es prácticamente nula. Por desgracia, que no veamos la basura no significa que no esté ahí, y el Mediterráneo está completamente lleno.

Así lo afirman Miquel Canals, Georg Hanke y otros 26 científicos de todo el mundo en un estudio liderado por la Universidad de Barcelona. Como explica Miquel Canals, "en el Mediterráneo, la acumulación de desechos en el lecho marino es un problema ecológico muy serio. En algunos lugares de la costa catalana, hay grandes acumulaciones de basura". Y continúa: "Cuando hay grandes tormentas, como fue el caso de Gloria en enero del año 2020, las olas lanzan estos desperdicios a las playas. Algunas de ellas estaban, literalmente, pavimentadas con basura. Esto fue una muestra de cómo de contaminados están nuestros mares".


"A los seres humanos como especie, nos importa muy poco, o nada, evitar que la basura se acumule por todos lados"


A pesar de esto, como se explica en el estudio, no es solo la costa catalana la afectada. El Mediterráneo es un auténtico vertedero. Ejemplo de esto es el estrecho de Mesina, la separación (de tan solo tres kilómetros) entre la isla de Sicilia y la península Itálica. Como explican los investigadores, es el área marina con mayor densidad de basura del mundo, con más de un millón de objetos por kilómetro cuadrado en algunas partes. Ese es un problema que solo se va a acentuar en los años que están por venir, dado que, como indica el estudio, en los próximos 30 años la cantidad de basura en el mar alcanzará, de seguir los patrones actuales, 3.000.000.000 toneladas, el equivalente a 8.220 Empire State Buildings (solo que, al ser mucho menos densa la basura, ocupa un espacio enormemente mayor).

Además, toda esta basura no se distribuye de forma homogénea por los océanos de la Tierra, sino que tiende a acumularse en determinadas áreas específicas. Como explica el investigador Miquel Canals: "Todavía no sabemos hasta qué punto llega la presencia de basura en nuestros mares y océanos. Las regiones más afectadas por este problema son aquellas que están rodeadas de tierra, los fondos de las costas, las áreas marinas expuestas a grandes desembocaduras de ríos y lugares en los que tenga lugar una gran explotación pesquera, incluso lejos de la tierra".


La basura más común

Es fácil pensar que no somos nosotros los responsables de esta contaminación: "Seguramente, se tratará de grandes y malvadas empresas que no tienen ningún tipo de respeto por el medioambiente". El problema es que, si analizamos (como han hecho los autores del estudio) qué tipo de materiales y productos encontramos en las profundidades, esa teoría queda desmentida y queda claro que lo contaminamos todos: el 62% de los materiales producidos por el hombre y que podemos encontrar en el lecho marino son plásticos. El resto del grueso lo forman redes de pesca rotas, cerámica, metales, cristal, productos textiles y papel.

El fondo del estrecho de Mesina. (M. Pierdomenico, D. Casalbore y F. Chiocci / Universidad La Sapienza)

Cierto es que culpabilizarnos a nosotros mismos, de forma individual, no es justo. Para empezar, los investigadores explican que son las políticas medioambientales de cada país las que se aseguran de que la contribución al llenado del 'gran basurero marino' de sus ciudadanos sea mínima. Si nosotros tiramos un plástico al contenedor de envases y ese mismo plástico acaba en el océano, no somos, ni por asomo, nosotros los responsables, sino los que se ocupan de la gestión de los residuos. Esto también significa, por desgracia, que determinados países con políticas medioambientales más severas (como nosotros o casi todos los de la UE) contribuimos menos a la polución marina que otros menos desarrollados y que tienen protocolos más laxos. Pero el mar es un entorno compartido, y esa basura, aunque no sea nuestra, puede acabar en nuestras costas.

"La basura marina ha alcanzado los lugares más remotos del océano, incluso áreas en las que el ser humano no ha estado todavía", explica Miquel Canals. De hecho, como detalla el estudio, se han encontrado plásticos en el fondo de la fosa de las Marianas en el océano Pacífico, a una profundidad de 10.900 metros. Y continúa: "Para corregir esto, debemos solucionar las causas del problema. La principal es el exceso de generación de residuos, su filtrado al medioambiente y la mala gestión de esos residuos. A los seres humanos como especie, nos importa muy poco, o nada, evitar que la basura se acumule por todos lados".

Si ya es inaceptable que una bolsa de pipas acabe en el océano por una negligencia, ya sea del consumidor o de los responsables de la gestión de residuos, lo es mucho más que acaben 3.000 millones de toneladas. Eso ya es hiriente.




Por
Álvaro Hermida
21/01/2021 - 05:00
https://www.elconfidencial.com/medioambiente/clima/2021-01-21/basura-contaminacion-maritima-mediterraneo_2915352/