Foto por REUTERS from elmundo.es
Pasajeros en el aeropuerto de Guarulhos, en São Paulo
- Nueve de los 12 aeropuertos 'difícilmente' acabarán sus obras a tiempo
- Tampoco llegará un decimotercero aún pendiente de construir en Natal
- Sólo marchan por buen camino los proyectos en Río de Janeiro y Recife
El caos aéreo amenaza con adueñarse de Brasil durante el Mundial de fútbol de 2014. De los 12 aeropuertos con reformas previstas, nueve probablemente no lograrán terminar sus obras antes de que las selecciones aterricen en el gigante sudamericano. Además, es casi seguro que tampoco llegará a la cita un decimotercero aún pendiente de construir.
El sombrío panorama queda reflejado en un estudio del Instituto de Investigación Económica Aplicada (Ipea, en sus siglas en portugués) divulgado este jueves en Brasilia. De acuerdo con el informe, "difícilmente serán cumplidos" los plazos calculados por Infraero, la empresa pública que gestiona y opera los aeropuertos del país.
"Nueve de los 13 no estarán en condiciones de finalizar sus proyectos a tiempo. Además, el aeropuerto de Curitiba [capital del sureño estado de Paraná] sólo estará apto si no hay ningún atraso en el cronograma previsto", advierte la nota técnica.
El documento insiste en destacar la "extrema dificultad" de concluir la mayoría de las obras en las terminales de pasajeros. Y para ello toma como referencia los "plazos medios" de realización de proyectos de infraestructuras de transportes en Brasil. "Una obra lleva de media 92 meses para estar lista: ¡más de siete años!", critican los investigadores.
Sólo en 2017
De acuerdo con ese ejemplo, la reforma del aeropuerto de Manaos, la capital del estado de Amazonas, sólo finalizará en 2017 pese a que su conclusión estaba inicialmente prevista para diciembre de 2013.
Lo mismo ocurrirá, según el estudio, con los aeródromos de Brasilia, Campinas y Guarulhos (São Paulo), Cuiabá (Mato Grosso), Fortaleza (Ceará) y Salvador (Bahía).
Tampoco marchan por buen camino las terminales de pasajeros de Confins (Minas Gerais) y Porto Alegre (Rio Grande do Sul), que ya tienen preparados sus proyectos pero se prolongarán en torno a 80 meses. Es decir, seis años y medio, más allá del Mundial.
Río y Recife, sí
E igualmente está casi descartado que Natal (Rio Grande do Norte) cuente para entonces con un nuevo aeropuerto. "Las obras no tienen previsión de conclusión", señala el texto.
En cambio, Curitiba podría llegar por los pelos: en torno a junio de 2014, cuando arrancará el torneo. Si lo consigue, se unirá así al aeropuerto de Galeão, en Río de Janeiro, que se encuentra "en una situación operacional adecuada", y al de Recife (Pernambuco), donde sólo está prevista la construcción de una nueva torre de control.
Fuerte demanda
El Ipea culpa a los últimos Gobiernos por la "alarmante" situación. "Durante muchos años, Brasil no invirtió lo necesario en obras de infraestructura", critica.
De ahí que en 2010, 14 de las 20 principales terminales de pasajeros "funcionaran por encima de su límite" debido a la falta de adecuación de sus instalaciones al auge del transporte aéreo en el país. "En 2003, el número de pasajeros en los aeropuertos brasileños fue de 71 millones. En 2010, ese movimiento saltó hasta los 154 millones, un crecimiento del 117% en ocho años", resume.
La fuerte demanda hace que, incluso si las sedes del Mundial tuvieran sus infraestructuras completas para 2014, la "sobrecarga" se mantendría. En concreto, 10 de los 13 aeropuertos citados operarían ese año "en una situación crítica" -por encima del 100% de su capacidad- y apenas los tres restantes lo harían de forma "adecuada".
Por Luis Tejero (Corresponsal) | Río de Janeiro from elmundo.es 14/04/2011
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