El coste farmacéutico mundial contra el cáncer ascenderá hasta unos 367.000 millones de euros. La mayor prevalencia de la enfermedad, más patentes en vigor y nuevos y disruptivos tratamientos impulsan el repunte
Luchar contra el cáncer será cada vez más caro. El gasto sanitario global en medicamentos para esta enfermedad alcanzará los 409.000 millones de dólares (unos 367.000 millones de euros, al tipo de cambio actual) para 2028, lo que significará un 83% respecto a los 223.000 millones de dólares (unos 200.000 millones de euros) de 2023. Este notable aumento será el resultado de una creciente demanda de tratamientos de marcas con patente, la llegada de nuevas terapias (con tecnologías disruptivas, pero que requerirán de un mayor gasto en I+D) y a una mayor prevalencia de la enfermedad, que aumentará significativamente hasta 2050, especialmente en países de ingresos más bajos.
Los datos publicados por el IQVIA Institute for Human Data Science, a través de un informe, destacan una preocupación para los sistemas sanitarios globales. El crecimiento significativo en cinco tipos principales de tumores -cáncer de mama, pulmón de células no pequeñas, mieloma múltiple, próstata y riñón- representa actualmente el 56% de todas las ventas de medicamentos oncológicos, y estos seguirán dominando el gasto futuro. Si bien, los nuevos tratamientos en oncología son cada vez más específicos, ofreciendo medicina de precisión para pacientes que no se beneficiaron con las terapias tradicionales estándar, la comunidad oncológica global y continúa enfrentando dificultades relacionadas con las disparidades en el acceso y la atención.
“Es crucial encontrar un equilibrio entre la sostenibilidad económica y el acceso a estos tratamientos innovadores”, destaca Ángela Lamarca, responsable de prensa del Congreso ESMO (European Society for Medical Oncology), celebrado en Barcelona del 3 al 17 de este mes, y oncóloga del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz. Se espera que el gasto en medicamentos oncológicos en los principales mercados desarrollados crezca a un ritmo similar al de los últimos cinco años: entre un 11% y un 14% en EE UU y la UE, y entre un 4% y un 7% en Japón hasta 2028. Los mercados emergentes, liderados por China, también experimentan un aumento significativo del 13,2% anual.En España, en 2021, la factura a través de hospitales y farmacias alcanzó los 3.110 millones de euros, un 16,91% del total de medicamentos, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad.
“Las bioterapias avanzadas, como las terapias celulares y genéticas, están en desarrollo y representan un área creciente de gasto”, dice el informe. Los nuevos fármacos no solo están mejorando la eficacia de los tratamientos, sino que también están aumentando la supervivencia de los pacientes, asegura Lamarca.
Los tumores de mama, pulmón, mieloma múltiple, próstata y riñón concentran el 56% de las ventas
Estos programas, que incluyen terapias combinadas y medicamentos enfocados en alteraciones genéticas específicas, están a punto de cambiar la capacidad de atención médica. No obstante, resultan notablemente más caros que las quimioterapias tradicionales. La subida de costes es una preocupación importante. “El impacto financiero de estos nuevos fármacos es considerable y afectará el gasto global en oncología,” advierte Lamarca, quien también destaca la inclusión de tecnologías emergentes, como los radionúclidos y la inteligencia artificial, que están impactando los costes. “Estas tecnologías prometen avances importantes, pero también presentan un reto”.
Las nuevas terapias, como los anticuerpos conjugados y las CAR-T, de igual forma, se han convertido en opciones menos tóxicas que las quimioterapias tradicionales y más personalizadas, afirma Amelia Martín, directora del departamento de investigación de Farmaindustria. “Estamos en un momento álgido para la ciencia en oncología, con España como líder en ensayos clínicos”, señala la especialista. Entre 2020 y 2024, el 37% de las pruebas en el país se centran en oncología, y en 2023 se iniciaron 1.390 ensayos, con la mayoría en cáncer de pulmón, mama y linfoma. La industria farmacéutica ha sido el promotor del 87% de estos ensayos durante el año pasado. Esto es una gran oportunidad para la industria nacional, pero también para que los pacientes puedan acceder a las nuevas tecnologías contra la enfermedad.
Terapias para que el sistema inmune se ‘coma’ al cáncer
“El cáncer es la segunda causa de muerte en España y Europa, representando una carga significativa para pacientes, familias y el sistema de salud,” enfatiza Jordi Farrés, responsable de oncología en Bayer España. La firma ha puesto el foco en la investigación y desarrollo de medicamentos de precisión. “Tenemos una gran experiencia en áreas que incluyen: vías intrínsecas tumorales, terapias con radionúclidos dirigidos e inmunooncología de próxima generación”.
Por ejemplo, explica el directivo, la compañía trabaja en el tratamiento del cáncer de próstata desde la etapa temprana hasta la metastásica, con el objetivo de extender la supervivencia y limitar los efectos secundarios. El enfoque en la oncología de precisión incluye el inhibidor de TRK, un fármaco que trata tumores con la fusión del gen NTRK. Esta fusión impulsa el crecimiento del cáncer, y el inhibidor bloquea su actividad, frenando el avance tumoral. A diferencia de tratamientos convencionales, este fármaco actúa según la mutación genética del tumor, sin importar su localización, lo que lo convierte en una opción personalizada y eficaz para pacientes con esta alteración.
De igual forma, la farmacéutica MSD avanza en la investigación y desarrollo de tratamientos novedosos como el pembrolizumab, con el mayor número de ensayos clínicos en marcha. “Hemos presentado datos que respaldan su eficacia no solo en etapas avanzadas, sino también en fases más tempranas de algunos tipos de cáncer en los que los pacientes presentaban necesidades no cubiertas”, explica Joaquin Mateos, director médico de MSD España. En concreto, para cáncer de mama triple negativo (CMTN) de alto riesgo, los estudios recientes han demostrado que su combinación con quimioterapia ha mejorado significativamente la supervivencia en pacientes en etapas tempranas. “Estamos muy orgullosos de este avance, dado que el CMTN es una de las formas más agresivas y difíciles de tratar del cáncer de mama”.
Además, la firma se centra en el desarrollo de nuevas combinaciones terapéuticas, el uso de conjugado de anticuerpo-fármaco (ADC), o la terapia individualizada con neoantígenos. En los últimos años, la compañía ha fortalecido y expandido significativamente su cartera de productos oncológicos, gracias a una estrategia que combina inmunoterapia, terapias dirigidas y tratamientos individualizados. “El crecimiento ha estado impulsado por nuestro tratamiento anti-pdl1. Desde su primera aprobación para el tratamiento del melanoma avanzado, pembrolizumab ha ido recibiendo diferentes aprobaciones en una amplia gama de cánceres, incluidas indicaciones en tipos de tumores muy prevalentes como el de pulmón”, recalca.
Lamarca enfatiza que los oncólogos enfrentan el reto de equilibrar la oferta de tratamientos inmunoterapéuticos avanzados con las limitaciones financieras de los sistemas de salud. “Cuantificar los costes de tratamiento es fundamental para crear una asistencia sanitaria sostenible”, explica. Y sugiere que la optimización de la dosis podría ser una estrategia útil para reducir costes. “El uso de dosis más bajas, siempre que mantenga el mismo beneficio clínico, podría minimizar el gasto en nuevos tratamientos”, concluye.
Óscar Granados
Madrid - 21 SEPT 2024 - 05:15 CEST