El Rolls Royce Sweptails no es un coche para supersticiosos, ya que está valorado en 13 millones de euros.
- Todos ellos pertenecen a producciones limitadas de muy pocas unidades.
- Sus dueños valoran casi más la experiencia de conducirlos que el hecho en sí de poseerlos.
- Aúnan belleza y exquisitos acabados de lujo con la potencia bestial de sus motores.
Al contrario que el lujo, la exclusividad no es necesariamente una cuestión de dinero (aunque habitualmente vayan ligados), sino de pertenecer a un selecto grupo, integrado por unas pocas personas, que pueden disfrutar de una experiencia concreta y única a la que nadie más tiene acceso en todo el mundo.
Y en este sentido, pocos clubs más exclusivos como el de los propietarios de algunos coches de producción tan limitada que en ocasiones han llegado a suponer tan solo una única unidad.
Sumada esa circunstancia a la belleza y originalidad de sus líneas, la potencia de sus motores y la exquisitez de sus acabados, no hay más remedio que retomar la cuestión pecuniaria, ya que, inevitablemente, hablamos de los coches contemporáneos más caros del mundo.
Bugatti La Voiture Noire
La ocasión lo requería: era el salón del motor de Ginebra de 2019 y la casa italiana celebraba sus 110 años de historia con un 'hiperdeportivo' dispuesto a convocar toda la atención.
Con una sorprendente estética y una aerodinámica cuidada al milímetro, lo que más sorpresa generó fueron sus 1.480 caballos de potencia, con un motor W16 de 8 litros que le permite alcanzar los 400 kilómetros por hora.
Para otorgar aún más relevancia a la ocasión, un modelo llegó a salir un modelo de la cadena de montaje, por lo que no es de extrañar que se acabara pagando por él la cifra más alta jamás desembolsada por un coche hasta la fecha: 16,7 millones de euros.
Rolls Royce Sweptails
Estamos ante un vehículo que combina elementos de coche, avión y yate, las tres grandes pasiones, según cuentan, del exclusivo cliente que encargó el diseño original.
A partir de ese prototipo salieron en total 28 unidades de la fábrica automovilística alemana, que lo presentó en el Concorso d'Eleganza Villa d'Este de 2017. A 13 millones de euros por coche, estamos ante uno de los más caros jamás fabricados.
Mercedes Benz by Maybach Exelero
Aquí tenemos otro modelo único, encargado en 2004 por la empresa subsidiaria alemana de Goodyear Fulda con el objetivo de probar los nuevos neumáticos de la marca en su máximo rendimiento.
Para llevarlo a cabo, Mercedes Benz recurrió no solo a un diseño que potenciaba la velocidad, sino también a unos materiales destinados a ofrecer la mayor versatilidad tanto en su interior como en su exterior.
Cuenta con un motor V12 de doble turbo al tiempo que ofrece una capacidad que hace viable la presencia de pasajeros. La factura final ascendió a 7,5 millones de euros.
Koenigsegg CCXR Trevita
Para los no entendidos en motor será más fácil comprender el alto precio alcanzado por este singular modelo de la marca sueca: su acabado exterior, patentado con el nombre Diamond Wave, se basa en un 'manto' de diamantes sobre la fibra de carbono.
De hecho, lo que iba a ser una edición limitada de tres unidades tuvo que quedarse en dos debido a lo complicado que resultaba la fabricación de dicho material.
Con un precio que alcanzaba los 4,5 millones de euros, el modelo monta un potente motor V8 de aluminio biturbo que acelera de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos. Dada la curiosidad que despertó el Trevita, Koenigsegg presentó un modelo más asequible, el Jesko, en el Salón de Ginebra de 2019.
Lamborghini Veneno Roadster
De este superdeportivo fueron nueve las unidades que salieron de la fábrica de la firma italiana, todos incorporando un motor V12 aspirado de de 6,5 litros, que le permite acelerar de 0 a 100 en 2,9 segundos.
La apuesta de Lamborghini era adaptar a la carretera convencional toda la potencia y aerodinamismo de un prototipo de carreras, y el resultado fue este modelo de clara inspiración aeronáutica y grandes proporciones. Su precio alcanzó los 3,5 millones de euros.
Bugatti Veyron Mansory Vivere
Este excepcional automóvil, del que solo se fabricaron dos unidades, nació de la colaboración entre la casa italiana Bugatti y el estudio alemán de personalización de automóviles Mansory.
Juntos trabajaron con el Veyron de serie para convertirlo en este superdeportivo al que Mansory aportó, entre otras cosas, su característico tejido de fibra de carbono.
Se conservó el motor del Veyron de serie, con 1.200 CV de potencia, con una velocidad máxima era de 408 km/h. Al final, esta obra maestra del asfalto alcanzó los 3,2 millones de euros.
W Motors Lykan Hypersport
Con sede en Dubái, la empresa de origen libanés W Motors sorprendió al sector del motor con la presentación en 2013 de su primer superdeportivo, el Lykan Hypersport.
Con faros LED de titanio y 420 diamantes de 15 quilates incrustados, además de una pantalla holográfica en la consola central, no tuvo dificultad para auparse a los primeros puestos de los coches más caros del momento.
Fiel reflejo de los gustos de ese mercado, todo en este coche resulta 'excesivo'. Con un motor de seis cilindros y 3,8 litros biturbo, acelera de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos, con una velocidad máxima de 385 km/h. Otros detalles, como el tapizado cosido con hilo de oro de sus asientos, ayudan a comprender por qué su precio se sitúa en los 3,1 millones de euros.
Pagani Huayra BC
En término quechua, huayra significa viento, lo que supone una pista bastante evidente de cuál es la prioridad de este superdeportivo biplaza. La combinación de su motor V12 biturbo y su carrocería coupé le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en 2,94 segundos y alcanzar los 386 km/h.
De hecho, es interesante observar que se ha llevado a cabo una importante revisión del diseño del Huayra convencional para otorgar a este exclusivo modelo, del que solo se han fabricado 20 unidades, la mejor eficiencia frente al viento. Por todo ello su precio asciende hasta algo más de 3 millones de euros.
Ferrari Pininfarina Sergio
Ferrari solo montó seis unidades de este excepcional automóvil con el que la casa italiana quería rendir homenaje a Sergio Pininfarin, quien fue, durante más de cuatro décadas, presidente de la legendaria compañía.
En consecuencia, el diseño de este biplaza evoca los días de gloria de Ferrari durante la dirección de Pininfarin, en la década de los 60 y 70, con una fuerte inspiración en el 458 Spider.
Alcanza los 320 km/h y pasa de 0 a 100 km/h en menos de 3,4 segundos. Solo se fabricaron seis unidades, todas para clientes muy especiales que tuvieron que pagar 3 millones de dólares por su nuevo automóvil.
Aston Martin Valkyrie
Dicen de este coche, que aún no ha llegado al mercado, que es el hiperdeportivo definitivo. El desarrollo de este híbrido ha sido llevado a cabo por Aston Martin y Red Bull, en un acuerdo para crear una auténtica bestia sobre ruedas de la que ya se han vendido 150 unidades aunque aún no ha pisado la calle (de hecho, enfrenta todavía al parecer algunos problemas de desarrollo).
Aunque no se han publicado los precios oficiales, todas las estimaciones apuntan a cerca de 3 millones de euros por este vehículo equipado con un motor V12, con 6,5 litros de cilindrada, que asegura una velocidad máxima superior a los 321 km/h. Estamos en definitiva ante el coche más rápido del mundo homologado para circular por las carreteras.