El XB-1, un prototipo a escala 1:3 del Overture. (Boom Supersonic)
La compañía Boom Supersonic tiene un objetivo literalmente increíble: viajar a cualquier parte del mundo en cuatro horas pagando solo 100 euros por billete
Si todo va según lo planeado, la compañía aeronáutica Boom Supersonic volará su prototipo XB-1 a finales de este año, una versión a escala 1:3 de su avión comercial supersónico Overture. La compañía tiene un objetivo igual de increíble que sorprendente: ofrecer viajes de cuatro horas a cualquier parte por solo 100 dólares el billete de ida.
En principio, parece un timo. Pero, según las declaraciones del experto en aviación y profesor de la Universidad de Siracusa Sean O’Keefe a la CNN, es un objetivo "audaz pero posible".
O’Keefe —que fue presidente del consejo de Airbus y secretario de la armada norteamericana, pero que no está asociado con Boom Supersonic— afirma que “requerirá dos o tres generaciones de tecnología, desarrollo y descubrimientos, que equivale a unos 20 años”.
Una carrera difícil
El mayor obstáculo, según O’Keefe, serán los materiales que no solo deberán resistir el calor generado por la fricción de las partículas de aire a velocidades supersónicas, sino, además, ser más baratos y fáciles de mantener que los del legendario Concorde.
Ilustración del Overture a altitud de crucero. (Boom Supersonic)
Al final, la clave no solo es fabricar los aviones a un precio razonable, sino que el coste total por hora de vuelo sea lo suficientemente bajo para que los billetes sean competitivos. Eso no solo incluye el coste de mantenimiento del Overture o la capacidad de poder utilizar la infraestructura aeroportuaria actual, sino también su consumo.
Según el CEO de Boom Supersonic Blake Scholl, será posible porque la tecnología ha cambiado drásticamente desde los años 60. De hecho, su objetivo es que la huella de carbono del Overture sea 100% neutral gracias a la optimización de su diseño y nuevos tipos de motores “que consumirán combustibles alternativos”, afirma.
School no da detalles sobre esto último, pero asegura a CNN que “capturarán carbono de la atmósfera, licuificándolo en combustible para el avión”. El avión, dice, solo moverá carbono en un ciclo.
Aunque le creyéramos a pies juntillas y por mucho que O’Keefe diga que es factible, la idea de tener vuelos a unos 80 euros dentro de dos décadas sigue pareciendo casi imposible. Sobre todo cuando hace un par de años anunciaron que, al principio, su objetivo es que un Madrid-Nueva York cueste unos 5.000 dólares cuando el primer Overture, según Scholl, entre en servicio en 2026. Eso es muchísimo menos que los 20.000 dólares que costaría hoy un Londres-Nueva York con el Concorde, pero todavía muy lejos de su objetivo final de los 100 dólares por trayecto.
Aun así, los inversores siguen poniendo dinero en la empresa. El último ha sido el brazo de inversión de capital de American Express y, según Boom Supersonic, los pedidos iniciales ascienden ya a 6.000 millones dólares.
Ilustración del Overture en ascenso. (Boom Supersonic)
El primer vuelo a la vuelta de la esquina
A favor de Scholl y su Boom Supersonic es que parece estar avanzando a buen ritmo, a diferencia de la competencia. En octubre del año pasado presentaron el primer prototipo del Overture, construido a escala 1:3 para probar el concepto y algunas de las tecnologías que va a utilizar la versión comercial.
El Boom XB-1 —como se llama esta máquina— es una demostración viva de que, efectivamente, la tecnología ha avanzado drásticamente desde los años en los que se diseñó y construyó el Concorde, básicamente con papel, tinta, escuadra y cartabón.
El XB-1, un prototipo a escala 1:3 scale del Overture. (Boom Supersonic)
Un ejemplo: los tests en túnel de viento para probar que el diseño del XB-1 se comporta como predecían los modelos y que es seguro, tardaron apenas cinco meses. En el Concorde, los "mismos tests tardaron una década”. Eso no implica que todo haya sido un camino de rosas. Aunque el XB-1 se ha desarrollado y construido en un tiempo récord comparado con el Concorde, ha habido numerosos ajustes en el diseño y retrasos en su primer vuelo, ahora programado para fin de año.
En total, solo han pasado cuatro años para que el XB-1 haya pasado de diseño a avión listo para el despegue. Su primer vuelo, dice Boom Supersonic, llegará a Mach 2.2 usando tres variantes militares del General Electric J85, un pequeño motor a reacción usado en aviones legendarios como el Northrop T-38 Talon.
Queda poco para ver si el XB-1 es un éxito rotundo o un fracaso estrepitoso. Como dice Scholl, “o fallamos o cambiamos el mundo”. No hay término medio. Si realmente consiguen acortar las más de 500 rutas que tienen planeadas a solo cuatro horas a 80 euros el trayecto, será realmente un cambio revolucionario para la humanidad. Aunque llegue dentro de dos o tres décadas.
Por
Jesús Díaz
18/05/2021 - 17:41 Actualizado: 19/05/2021 - 15:22
Madrid-Nueva York en 4 horas por 80 euros: la promesa de Boom Supersonic (elconfidencial.com)