La madrugada del jueves al viernes se produjo un hecho sin precedentes, no solo en nuestro país, sino en casi todo el mundo. Una 'pandemia digital' que se desencadenó por el fallo de una actualización de la plataforma de seguridad CrowdStrike, incompatible con Microsoft.
Todo esto generó un caos en buena parte del mundo, provocando la cancelación de miles de vuelos y bloqueando sistemas internos y externos en diversos sectores, como hospitales, bancos, bolsas y otras instituciones, al dejar de funcionar algunos ordenadores basados en Microsoft. En concreto, y tal y como confirmó la propia compañía tecnológica, el error de CrowdStrike afectó a 8,5 millones de dispositivos.
Muy pocos países fueron los que se libraron del ataque informático. Uno de ellos fue China, que se puede decir que, prácticamente, salió ilesa del apagón. El motivo principal es que CrowdStrike, la empresa de ciberseguridad responsable del apagón, casi no se usa en el gigante asiático. China no depende tanto de Microsoft como el resto del mundo, y son las compañías como Alibaba, Tencent y Huawei son las proveedoras dominantes del servicio en la nube.
Por tanto, la mayoría de las víctimas que se quejaron de este hecho fueron principalmente firmas u organizaciones extranjeras, como por ejemplo las cadenas de hoteles internacionales como Sheraton, Marriott y Hyatt que operan en ciudades del gigante asiático.
Seguridad nacional
En China están obsesionados con el hecho de no depender del extranjero, y menos en cuestiones de seguridad nacional. Es por eso que en los últimos años, organizaciones gubernamentales, negocios y operadores de la infraestructura han estado reemplazando cada vez más sistemas informáticos extranjeros con nacionales.
"Microsoft opera en China a través de un socio local, 21Vianet, que maneja sus servicios independientemente de la infraestructura global. Ese sistema aísla los servicios esenciales chinos, como la banca y la aviación, de las interrupciones globales", señala Josh Kennedy White, un experto en ciberseguridad basado en Singapur, a la BBC.