Las obras del 111 West 57th Street ,el rascacielos residencial más estrecho del planeta (24 veces más alto que ancho), tocan a su fin y la comercialización de sus lujosos apartamentos ha desvelado el que será el más caro de la ciudad de Nueva York. El Triplex Park Loggia Penthouse 72 costará 66 millones de dólares.
111west 57th street west, Nueva York. Últimamente en Nueva York se habla más de esta dirección que de Trump y del coronavirus juntos. ¿El motivo? El fin de obras de edificación del edificio más delgado del mundo y también del más alto del hemisferio occidental. De hecho, sus 84 pisos, sobrepasan en 30 metros al Empire State. Tras casi 7 años, y un coste de 800 millones de dólares, la torre se ha coronado y sus apartamentos de lujo se han convertido en todo un reclamo para inversores y millonarios. El rascacielos de lujo, de 435 metros de altura, es 24 veces más alto que ancho, y "su estrechez" hace que solo permita una residencia por planta.
Conocido también como el edificio Steinway Tower, el 111 West 57th Street se ha construido en voladizo sobre el histórico edificio Steinway Hall, levantado originalmente en 1925 y que albergaba salas de conciertos y salas de exposición de pianos para los famosos Steinway & Sons.
En 2013, Steinway Hall se vendió a los desarrolladores de 111 West 57th Street en 2013 y SHoP Architects, los nuevos impulsores del proyecto, decidieron absorberlo, restaurarlo y mantenerlo como punto de entrada para los residentes.
La ubicación de este rascacielos delgado como un lápiz, entre las avenidas 6 y 7, es extraordinaria por su proximidad a lugares tan neoyorkinos como el Carnegie Hall, el Radio City Music Hall, el Museo de Arte Moderno, los distritos comerciales de la Quinta Avenida y la Calle 57 (conocida como la Billionaires Row por ser la zona de los inversionistas súper ricos que están impulsando la construcción de torres residenciales).
Compra on line
Un dato curioso en esta época de crisis provocada por el coronavirus es que algunos de los primeros compradores están adquiriendo las viviendas con visitas virtuales. Esta nueva normalidad presenta on line todos los detalles de la torre y ahora acaba de anunciar la venta de dos nuevas residencias, con inmensas terrazas cubiertas. Entre los dos, alcanzan la cifra de venta de 105,5 millones de dólares.
El primero es un penthouse triplex llamado "Triplex Park Loggia Penthouse 72", con espectaculares vistas a Central Park y, hasta la fecha, el más caro del edificio. Su precio es de 66 millones de dólares, cuenta con una superficie de 662 m2 y su diseño interior ha sido llevado a cabo por el prestigioso estudio Sofield. Con cuatro dormitorios, cinco baños y un aseo en total, así como una cocina totalmente equipada con electrodomésticos Gaggenau de primera línea, desde los hornos de convección y vapor hasta la máquina de café. El dormitorio principal en el tercer piso cuenta con dos vestidores y dos baños con los suelos de ónix blanco veteado y accesorios de bronce. Los suelos de la casa son de roble macizo en tono gris. Además tiene 127 m2 de porche al aire libre.
El segundo apartamento que se comercializa, ya terminado, es un dúplex, el Tower Residence 50, de 39,5 millones de dólares y un diseño muy similar al tríplex. Su superficie interior es de 418m2; sin embargo, su zona exterior es de 185m2.
Vistas sin igual
Desde su cima se pueden distinguir las luces brillantes del aeropuerto JFK y tanto estas residencias como todas las que conforman la delgadísima torre están alineadas en perfecta simetría con el eje de Central Park, lo que ofrece a los futuros residentes una vista simétrica de este icónico espacio público y verde, el Upper East Side y el Upper West Side. En las cinco primeras plantas se sitúan zonas comunes de ocio, una piscina de entrenamiento, spa con sauna, salas de vapor y tratamientos, gimnasio, salas de reuniones y comedor privado con terraza al aire libre, además de tiendas de lujo y conserje exclusivo.
Pero si este rascacielos Art Deco de Manhattan se ha hecho tan popular es por el exquisito trabajo que ha realizado SHoP Architects, los responsables del proyecto. Han cuidado todos los detalles; por ejemplo, han empleado, para las fachadas este y oeste, cerca de 43.000 baldosas de terracota esmaltadas de alta tecnología porque está muy de actualidad en los edificios modernos que comienzan a renunciar a los materiales fríos como el aluminio perforado en beneficio de los cálidos.
Así, los pilares de terracota vidriados serpentean en su inmensa fachada agregando una textura exterior lechosa que se derrite y contrae cuando la luz se arquea sobre Manhattan. Susan Tunick, ceramista y experta en terracota de Nueva York, asegura que: "durante mucho tiempo, se usaba la terracota para que pareciera granito, madera o vidrio y ahora se vuelve a utilizar tal cual porque se ve bien, envejece bien y es fácil de usar. Los edificios antiguos así lo demuestran". La fachada norte, por su parte, aprovecha la proximidad del rascacielos a Central Park y sus increíbles vistas para dejar un muro-cortina de vidrio.
Sin embargo, el edificio también ha sido foco de polémicas desde que comenzó la construcción a principios de 2014. Protestas sindicales, demandas de un exsocio de capital, una ejecución hipotecaria y la acusación del contratista general del proyecto por fraude, retención de salarios... hasta que, después de importantes sobrecostos y retrasos, el encofrado de hormigón de la torre se completó en abril de 2019, y ahora se ha rematado poniendo fin a las disputas.
CRISTINA ACEBAL
24 SEP. 2020 - 08:42
https://www.expansion.com/fueradeserie/arquitectura/2020/09/24/5f69c077468aebb5128b458d.html
