sábado, 7 de noviembre de 2020

El enésimo retorno del bitcoin

 


El bitcoin apunta a su récord histórico de 20.000 dólares, que alcanzó en el 2017 (DADO RUVIC / Reuters)


La pandemia y la incertidumbre disparan la cotización de la criptomoneda como valor refugio


Está de regreso, aunque nunca se fue del todo. Con la economía global hundida en la peor crisis desde la Gran Depresión y con la segunda ola de la pandemia, hay un activo que se está revalorizando más que cualquier otro: supera a las bolsas, los bonos, las materias primas.

Es el bitcoin. La criptomoneda por antonomasia superó ayer la barrera de los 15.000 dólares, su valor más alto desde enero del 2018. En lo que va de este atormentado 2020, la moneda virtual se ha apreciado cerca del 115%. A mitad de marzo, antes del confinamiento, el bitcoin rondaba los 4.000 dólares. Desde entonces ha subido como un cohete y se ha triplicado. Los analistas creen que su máximo histórico, cuando en diciembre del 2017 rozó la barrera de los 20.000 dólares, está a un tiro de piedra.

 

Hay unos vientos que soplan a favor de la criptodivisa en estos momentos. En un contexto de extrema volatilidad como el actual, en el que la presidencia de EE.UU. está en juego por un puñado de votos, el bitcoin desempeña un papel de valor refugio, parecido al que suele jugar el oro en circunstancias similares, más que como medio de pago.

Asimismo, después del ostracismo inicial la divisa empieza a encontrar cierto apoyo en el establishment de Wall Street. Por ejemplo, el banco JP Morgan anunció recientemente que “su potencial alcista es considerable”. Su consejero delegado, Jamie Dimon, ha cambiado de idea al respecto.

Récord a tiro

El precio del bitcoin se ha triplicado desde el confinamiento y apunta a los 20.000 dólares

Tal solo en noviembre del 2018 declaraba textualmente “me importa una mierda el bitcoin” y en el 2017 lo tachó de “fraude”. Ahora el banco lo considera una oportunidad. Según la entidad, el precio del bitcoin tendría que aumentar 10 veces para igual los niveles actuales de inversión del sector privado en oro. Además, a diferencia del mineral, para enviar bitcoins basta con recurrir a la cadena de bloques ( blockchain ) en lugar del transporte físico, algo especialmente útil en tiempo de coronavirus.

Hace pocos días la plataforma de pago Pay Pal también dio luz verde a la moneda creada por Satoshi Nakamoto al anunciar que permitirá a sus usuarios adoptarlos como “divisa alternativa”, en un guiño hacia el colectivo de los millennials , que se sienten atraídos por este instrumento a la hora de planificar sus inversiones. “En lugar de verlo como un competidor y tratar de crear divisas alternativas, las plataformas han entendido que les conviene aprovechar el bitcoin, la de uso más extendido y que se percibe como más independiente”, apunta Victor Escudero, experto en ciberseguridad y uno de los pioneros del bitcoin en España.

Es cierto que la adopción del bitcoin es todavía minoritaria y, según Statista, en las economías desarrolladas menos del 10% de la población lo ha usado en algún momento. Esto significa que como activo aún está en una fase temprana, de ahí el entusiasmo que despierta.

Pero la opacidad de esta criptodivisa, que no está sujeta a la vigilancia de ningún banco central, sigue despertando inquietud. Justo ayer el Departamento de Justicia de EE.UU. anunció haber pedido a un juez confiscar el equivalente de 850 millones de euros en bitcoins, resultantes de un movimiento procedente del sitio darkweb Silk Road, una plataforma vinculada a actividades ilícitas (venta de droga incluida) que se cerró en el 2013 (por cierto: su fundador Ross Ulbricht cumple cadena perpetua en prisión por blanqueo y tráfico de estupefacientes y sigue dando consejos de inversión desde la cárcel).

Polémica

EE.UU. ha pedido confiscar 850 millones en criptodivisa de procedencia ilícita

En España también se vivieron recientemente episodios controvertidos, como el de la plataforma Arbistar, que dejó a sus clientes sin su dinero en bitcoin alegando un problema informático. Santi Fuentes, su máximo directivo, fue detenido hace unos días en Tenerife y tras la imputación de los delitos de estafa, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal ha sido puesto en libertad condicional.