domingo, 17 de julio de 2022

¿No te gusta el trabajo híbrido? Cinco consejos para que el cambio sea menos doloroso


Foto: Dreamstime


La vuelta a la oficina tras estos largos meses trabajando desde casa ha generado un sinfín de problemas en los empleados: ansiedad, estrés, problemas de conciliación. Algunas empresas han querido paliar estos problemas imponiendo el trabajo híbrido, de tal manera que los trabajadores puedan readaptarse con mayor facilidad. No obstante, esta situación no está siendo sencilla para gran parte de la población, por lo que los expertos han identificado cinco aspectos que pueden hacer que el regreso sea menos doloroso.

El trabajo hibrido, probablemente, sea el futuro del mercado laboral mundial. En EEUU, el 60% de las empresas implementarán esta modalidad a lo largo del año, según datos de la firma de investigación de mercado Forrester.

De hecho, grandes compañías como Apple o Google ya dirigen a sus trabajadores de esta forma. Por este motivo, no queda otra que acostumbrarse a combinar el trabajo en la oficina con la labor en el hogar, una situación a la que tendrán que hacer frente, tarde o temprano, tanto trabajadores como empresarios. Para ello, es buena idea hacer caso a estos cinco consejos que los expertos han comentado con The Washington Post.

Planificar con antelación para maximizar el tiempo y reducir el estrés

Uno de los aspectos que más cautivo a los trabajadores durante la pandemia fue la flexibilidad laboral. El teletrabajo permitía que los empleados no tuviesen que preocuparse por el transporte, la ropa o la comida, ya que todo lo que necesitaban estaba a un par de pasos de su salón.

Sin embargo, la vuelta a la oficina obliga a volver a idear cada día un menú que pueda recalentarse en la oficina y no atente contra los planes de salud, así como despertarse antes para vestirse y llegar al lugar de trabajo.

Los expertos recomiendan tomarse el tiempo suficiente para planificar la semana, cocinando y eligiendo el vestuario el día anterior para reducir el tiempo de preparación durante la mañana.

Por otro lado, es recomendable llevar a cabo descansos periódicos en la oficina que permitan despejar la mente. Saltar de una reunión a otra, o conectar un sinfín de tareas, aumentará notablemente el estrés y podrá derivar en casos de ansiedad.

Además, cuando los trabajadores se tomen un descanso deben intentar obtener objetivos no laborales.

Coordinar el horario y las tareas

Muchos trabajadores piensan que es totalmente innecesario volver a la oficina para llevar a cabo labores que se pueden realizar perfectamente desde casa, este es el caso de muchas empresas. No obstante, hay empleados que sí necesitan estar en la oficina para desempeñar parte de sus funciones.

Por este motivo, es vital coordinar el horario y las tareas. Como punto de partida, es necesario dejar para los días de oficina cualquier labor que no pueda realizarse desde casa. Por otro lado, los expertos recomiendan reservar las reuniones y los trabajos 'hombro con hombro' para los días presenciales.

De esta manera, se cuidará la labor de equipo, así como la relación entre trabajadores. Las tareas restantes se destinarán al trabajo remoto.

Así, los empleados pueden utilizar el tiempo entre reuniones para abordar temas de comunicación sin necesidad de recurrir a las tediosas videollamadas, mientras que se recupera el tiempo perdido en casa.

Reducir las expectativas de productividad

Los expertos son conscientes de que la productividad se reduce en la oficina. De hecho, según Goldman Sachs, los modelos de trabajo híbridos y remotos pueden aumentar la productividad en un 4%. No obstante, hay que atender a las necesidades de los empleadores, por lo que es necesario reducir las expectativas a lo que permite una oficina.

Aquí, las reuniones y las conversaciones improvisadas suelen alargarse más de lo necesario. Además, el cambio de una tarea a otra puede conllevar más tiempo, ya sea por necesidades de desplazamiento o por reorganización del lugar de trabajo.

No obstante, el trabajo presencial también ofrece grandes oportunidades. Es recomendable aprovechar estos espacios para buscar un momento en el que tomar un café con los compañeros, así como almorzar con ellos.

Acomodar la oficina

Otro de los aspectos que supuso un cambio en la mentalidad de los trabajadores fue la comodidad que suponía el trabajo en el hogar. Por este motivo, es buena idea trasladar algunas de estas comodidades a la oficina.

Los expertos recomiendan que los empleados se pregunten: "¿Hay algún aspecto que pueda seguir llevando a cabo en mi lugar de trabajo?".

Los trabajadores podrían utilizar calzado más cómodo, preparar alimentos que permitan seguir alcanzando los objetivos de salud, planear paseos con los compañeros en los que tratar los temas que normalmente se tratan en un despacho, o dejar espacio para realizar alguna actividad deportiva.

Además, los expertos recuerdan que hay objetivos no laborales que no pueden alcanzarse desde casa, como las relaciones con otras personas.

Experimentar y tener paciencia

Esta modalidad de trabajo es igual de desconocida para los trabajadores y para los empresarios. Todavía quedan muchos pasos por andar, por lo que no hay mejor consejo que experimentar y tener paciencia.

Reformular los conceptos de trabajo, hacer retoques al esquema que se planifica cada día. En resumen, encontrar la forma de llevar las labores de la manera menos traumática posible.

En ocasiones, esto supondrá negociar con el empleador. Por supuesto, siempre tendrán más ventajas aquellos trabajadores que gocen de un nivel de flexibilidad mayor.