- Las autoridades ven al menos una decena de aspectos a mejorar para recibir la aprobación
- El rechazo no es definitivo pero es poco probable que se otorge dentro de poco
Si bien Elon Musk es conocido por ser dueño de Twitter, Tesla y Space X, el magnate también es fundador de Neuralink, una empresa de neurotecnología que tiene como objetivo implantar un chip dentro del cerebro humano, sin embargo, la compañía sigue encontrándose con problemas para convencer a las autoridades de que les deje realizar pruebas en personas.
Fue a principios de diciembre del año pasado, cuando Musk se mostró muy animado y convencido con que "en los próximos 6 meses vamos a poder empezar las pruebas de Neuralink en humanos". Pero lo cierto es que ni en ese momento, ni ahora, cuentan con el respaldo de las autoridades de EEUU para poder llevarlas a cabo.
El problema según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), organismo encargado de otorgar los permisos necesarios, es que la tecnología no es lo suficientemente segura para poder implantar un chip en un cerebro humano.
Y es que según ha descubierto un informe de Reuters, Musk tanteó al organismo a principios de 2022, pero rechazaron cualquier posibilidad señalando que había por lo menos una decena de aspectos en los que la compañía tendría que mejorar para poder conseguir luz verde en sus pruebas.
Entre ellos el más destacado, es la preocupación por la batería de litio que tiene esta tecnología y los daños que podría causar, al igual que ven posibilidades de que se dañen los tejidos cerebrales al poner y quitar el chip.
Los empleados de Neuralink con los que ha hablado el medio mencionado anteriormente reconocen que no esperan que la compañía consiga la aprobación pronto, ya que como explicaba un exempleado "Él (Musk) no es capaz de ver que esto no es un coche. Esto es el cerebro de una persona. Esto no es un juguete".
Lo cierto es que el rechazo de la FDA no es definitivo, pero Musk y todo su equipo de Neuralink tendrá que trabajar e invertir mucho más tiempo y dinero en aplacar los problemas que tiene en este momento todo el proceso de implementación, mantenimiento y extracción del chip en el cerebro para poder conseguir la aprobación oficial.
Recordemos que la intención de Neuralink es corregir los problemas neurológicos de los humanos que les provocan alguna situación de discapacidad, ya sea a la hora de moverse, escuchar o incluso ver, por lo que de ser exitoso supondría un enorme paso para la humanidad, pero por ahora tendrá que esperar.