Foto por AFP from BBC.co.uk
En un esfuerzo más para reducir la epidemia de obesidad y los problemas asociados a ésta, desde 2008 una ley obliga a los restaurantes en Nueva York a mostrar en sus menús el número de calorías de sus platillos.
Pero un estudio publicado esta semana en British Medical Journal (Revista Médica Británica) muestra que muy pocos consumidores prestan atención al número de calorías que van a ingerir.
Sólo uno de cada seis consumidores prestan atención a esta información y, en promedio, aquéllos que sí se interesan en el conteo ordenan 106 calorías menos que los que los ignoran.
En el Reino Unido y otros países de Europa se está planeando introducir un esquema similar en los restaurantes de comida rápida.
Hasta ahora 32 empresas han firmado un compromiso para desplegar la información calórica en sus establecimientos en este país, incluidos McDonald's y KFC.
Pero según señalan los expertos, la experiencia en Nueva York sugiere que los beneficios son limitados.
100 menos es bueno
El estudio, llevado a cabo por el Departamento de Salud de Nueva York, realizó una encuesta con más de 7.000 personas en 2007 -antes de la introducción de la ley- y otra encuesta en 2009, cuando ya se había puesto en práctica, en 168 establecimientos pertenecientes a 11 de las principales cadenas de restaurantes de la ciudad.
Aproximadamente 15% informó que había utilizado la información calórica, lo cual condujo a que compraran alimentos con menos calorías.
En algunos restaurantes como McDonald's el promedio de calorías por comida se redujo 5,3%.
Pero en otros restaurantes, el promedio de calorías consumido aumentó con el despliegue de información calórica, principalmente en aquéllos que promueven "ofertas" en las que entre más se consuma menos se paga.
En total, dice el estudio, no hubo cambios significativos en el promedio de calorías consumidas antes y después de la ley. Y algunas personas incluso mostraron un mayor consumo calórico después de la introducción de la legislación.
Los estudios han demostrado que si los consumidores de comida rápida pusieran atención al número de calorías que consumen esto podría ayudarlos a perder peso.
Incluso una reducción de 100 calorías por comida marca una diferencia importante.
Pero tal como muestra este estudio, es necesario establecer más campañas educativas para informar a la población la importancia del conteo calórico, ya que no toda la gente parece estar consciente de ello.
From BBC Salud 31 de julio de 2011