El parón en los vuelos comerciales dentro de nuestro planeta, la necesidad de buscar nuevos horizontes y la reconversión industrial con fondos públicos resucitan el interés por el espacio
Que hay sectores que han salido reforzados de la pandemia es algo obvio y claro. Ha ocurrido con la tecnología o la salud, pero hay otro que sin hacer tanto ruido también está en esa lista, incluso contra los primeros pronósticos. Nuevas inversiones, mayor proyección y países de todo el planeta peleándose por su dominio, la industria espacial ha visto cómo la pandemia, lejos de parar su resurgimiento, lo ha acelerado. Encerrados en casa, o casi, vive un momento de expansión con empresas e inversores en busca de una reconversión industrial y un nuevo horizonte.
Las últimas noticias son claras. Una 'startup' relacionada con los lanzamientos de cohetes está a punto de salir a Bolsa en EEUU, compañías como SpaceX o Blue Origin están rompiendo récords y recibiendo más inversión y atención que nunca y hasta los propios países se pelean por ser el más puntero en este terreno. Este mismo mes de febrero llegarán a Marte tres misiones de China, EEUU y Emiratos Árabes Unidos. Pero ¿cuál es la razón para este resurgir de la 'guerra de las galaxias'? Hay mucho de geopolítica e imagen, pero los expertos también apuntan otros motivos como la inyección de dinero para la reconversión industrial, la caída del sector de los vuelos comerciales o simplemente el agotamiento de la vía de crecimiento terrestre.
Un muy buen ejemplo de este resurgimiento es el multimillonario Jeff Bezos, que tras dejar su puesto en Amazon sueña con llevar a lo más alto Blue Origin, su idea para convertir el espacio en un nuevo lugar para viaje sin necesidad de ser millonario. En enero completó su decimocuarta misión, con el muñeco Mannequin Skywalker como protagonista y su idea es que el negocio llegue a mover los 1.000 millones de dólares que le cuesta a Bezos anualmente. Pero no es el único.
SpaceX, la compañía de Elon Musk que es una de las grandes protagonistas de la revolución espacial, está a punto de cerrar una nueva ronda de financiación que eleve su precio por encima de los 76.000 millones de dólares (valía unos 45.000 en agosto). Dinero que llega en medio de su proyecto Starlink que lanza satélites casi cada semana (está a punto de llegar a España) y de apuntalar su unión con la NASA consiguiendo récords como el de los astronautas que más tiempo han pasado en una nave espacial de Estados Unidos.
Jeff Bezos, en una nave de Blue Origin. (Reuters)
Fuera de los dos gigantes, otros magnates como Larry Page o Richard Branson también han puesto el foco en esta industria (se cree que Virgin Galactic ofrecerá en este 2021 el primer modelo para el turismo espacial viable) y esta ola de inversión también ha llegado a los mercados. Astra Space, una empresa que fabrica pequeños cohetes para lanzar al espacio, está a punto de ser la primera compañía de este tipo en cotizar en Bolsa por un valor de 2.100 millones de dólares, y Momentum, otra empresa basada en el transporte 'de última milla' fuera de nuestro planeta sigue el mismo camino. En Europa, y en España, aunque con menos tamaño, también despierta esta ola impulsada por las ayudas europeas para la reconversión tras el covid. La valenciana PLD Space tiene un proyecto de 100 millones de euros para lanzar satélites.
Por último queda la inversión pública, que hasta hace poco mantenía prácticamente el monopolio espacial y que aún sigue siendo un valor fundamental. En este terreno tanto EEUU como China o Rusia están buscando una nueva 'guerra de las galaxias' que sirva de motor industrial y de símbolo de poder, y otros países se están animando a la pelea. La llegada estos días a Marte de hasta tres misiones de tres países diferentes no es casual, sino que responde a un nuevo paradigma espacial, que también empieza a levantar sus dudas.
Un futuro prometedor, y un riesgo palpable
¿De dónde sale el dinero que mueve todo este interés? Por ejemplo, algunos expertos señalan que la reducción de los vuelos comerciales ha hecho que las empresas aeroespaciales busquen otras formas de financiación y han encontrado un hueco en estos nuevos proyectos que además cuentan con marca e imagen en un futuro pospandemia o del propio interés de las compañías e instituciones por dar un nuevo empujón a sectores alternativos, pero algunos empiezan a señalar ciertos peligros. Y es que no deja de ser un entorno complejo con mucho riesgo de que una idea acabe sin funcionar.
Según un informe de Bryce Space and Technology hubo 5.700 millones de dólares de inversión en nuevas empresas espaciales en 2019, rompiendo el récord de los 3.500 millones establecido un año antes. Y según uno de sus ejecutivos, en palabras al medio Space News, es probable que el dato de 2020 rompa de nuevo ese récord, pese a que muchos miembros de la industria vieron peligrar su futuro con la llegada de la pandemia y el riesgo sobre este sector sigue intacto.
Uno de los cohetes con satélites de OneWeb. (Reuters)
No hay que olvidar la polémica generada el pasado verano cuando en toda esta ola espacial Reino Unido decidió rescatar prácticamente de la quiebra a la empresa OneWeb, una compañía centrada en las telecomunicaciones por satélite y que acabó con varios altos funcionarios señalando el riesgo de la operación que rondaba los 400 millones de libras. Ese riesgo también se ha visto con los numerosos y costosos accidentes de SpaceX o las dificultades de Virgin para sacar adelante su proyecto, pues lleva desde 2009 anunciando los primeros viajes de turismo al espacio.
Sin embargo, los números son aún más grandes según otros informes que hablan a largo plazo. Para Bank of America la industria espacial podría triplicar su mercado en una década hasta llegar a generar más de 1.400 millones de dólares y con una importancia empresarial cada vez más fuerte. Ahora mismo el 80% de esta industria ya tiene financiación privada. Una lluvia de millones sin freno a la vista.
Por
Guillermo Cid
09/02/2021 - 20:55 Actualizado: 09/02/2021 - 21:54
https://www.elconfidencial.com/tecnologia/2021-02-09/industria-espacial-la-tierra-coronavirus_2942743/