Tomás Navarro, psicólogo y autor de 'Tus líneas rojas' (Ed. Zenith).Carlos Ruiz B.K.
¿Es egoísta priorizarse ante otros? El psicólogo Tomás Navarro señala las líneas rojas que nadie debería cruzar y cómo decir 'no' sin sentirse culpable.
-Es que, si no lo hago, se va a enfadar mi pareja.
-Tengo que ir aunque no me apetezca porque a mi amigo le va a sentar mal.
-No puedo decirle que no a mi jefe. Me quedo sin fin de semana.
Este tipo de diálogos son muy habituales. ¿Por qué se nos hace tan cuesta arriba y nos sentimos tan mal si no hacemos lo que los demás esperan que hagamos? ¿Cómo aprender a marcar límites? El psicólogo Tomás Navarro (Barcelona, 3 de mayo de 1974) propone algunas herramientas para armarnos de valor y preparar nuestra defensa ante el chantaje emocional de otros en su nuevo libro Tus líneas rojas (Ed. Zenith).
Como la metodología PAL. P de priorizarse. "Si no tienes claras tus prioridades, vivirás en las de otros". A de avisar. "Tan sencillo como decir por ahí no. Esto no me gusta. Pero que sea un discurso informativo. Y ver cómo reacciona la otra persona. Si responde bien, nos quedamos ahí. De lo contrario, pasamos a la siguiente letra". L de limitar. "Inequívocamente, tienes que poner límites de manera asertiva, contundente y no negociable". Si aún así no te hacen caso, recomienda irse. "No hay estudios que lo demuestren aún, pero el porcentaje de perfiles tóxicos ha aumentado tras la pandemia. Estamos fatal".
Esta es la primera pregunta que deberías hacerte si uno de ellos te rodea en el trabajo, en la familia o incluso duerme contigo: "¿Eres una prioridad para ti mismo?". ¿Su tesis? Si pretendemos una vida con relaciones sanas y sinceras debemos comprometernos a trazar líneas rojas.
En su nuevo libro, sitúa en la niñez la etapa clave en la que se aprenden los límites. ¿Cómo de importante es esa "crisis del no" del crío para que se convierta en un adulto más o menos sumiso?
Es fundamental. De pequeños, las normas de nuestros padres son las que tomamos por válidas. Según crecemos, buscamos el mismo tipo de relaciones refugio para sentimos a gusto. Resulta paradójico cómo nos limitamos nosotros pero no a los otros.
Somos grandes consejeros para el resto pero, ¿sabemos aplicarnos lo que vemos tan claro en los problemas de los demás?
Creemos que no merecemos la atención que sí dispensamos a otros. Decimos a una amiga: "Pobrecita, de buena eres tonta". En cambio, nosotros no somos importantes y no nos priorizamos. Uno de los pilares por los que fallamos, de hecho, es en el auto respeto. Esto no significa ser egoísta. Hay gente que abusa, que maltrata... y si no sabes marcar límites, como en el mundo animal, esas avispas te van a picar o esas boas se van a enrollar en tu cuello.
En líneas generales, ¿le cuesta más poner límites a la mujer que al hombre dado su tradicional rol social de cuidadora y su perfil empático?
Te diré que de cada 10 personas que atiendo por parejas tóxicas, ocho son mujeres. No podemos negar que hay estilos educativos diferentes para ellas y para ellos. Y lo discutiré con quien quiera. Afortunadamente, los patrones van cambiando, pero en nuestra cultura, se favorece más un papel de la mujer donde destaca la sumisión, la obediencia y el cuidado. Esto se incorpora en su ADN de tal forma que no encuentra disonante que alguien no le trate con el debido respeto, abuse o simule victimismo para que ella esté pendiente.
Quizá sea porque la mujer pide más ayuda que el hombre, ¿no? ¿Suelen ellas acudir más a terapia?
En ese sentido, son más adaptativas, porque el hombre llega tan tarde a consulta que está mucho más machacado. Lo que más cuesta es desaprender lo aprendido.
Habla de su propio proceso personal, en el que se dio cuenta de que no estaba marcando límites y así no podía seguir. Su punto de inflexión fue el nacimiento de su hija. ¿Se puede cambiar si se desea?
Aunque sea importante cómo te han educado, tú tienes la capacidad de ser asertivo: ver que hay otra manera de vivir si como lo estás haciendo no funciona. Eso requiere, claro, de mucho ánimo para defender tus derechos.
¿Es liberador ese primer 'no'? ¿Marca un antes y un después?
El primero suele ser el que más culpa genera. Por eso pongo un ejercicio a mis pacientes para que cambien de opinión en un restaurante una vez han ordenado el pedido. En alguna tontería o nimiedad de la vida cotidiana. Cuando lo utilizas con las personas que te bloquean, llega la paz. Si lo experimentas, no vuelves atrás.
Critica a quienes buscan en una pareja a su Alexa o Siri, los populares asistentes digitales. ¿Están la servitud y el vasallaje a la orden del día en las relaciones?
Me resulta muy triste escuchar que un trato normal sea considerado exquisito. Y esto es porque no nos tomamos en consideración. Cuando tú tienes que renunciar a cosas en tu vida por tu pareja, malo. El tráiler anuncia ya el final de la película, y es probable que en esas renuncias acabes solo. Renuncias ninguna, elecciones. Como dijo Shakira que hizo en su carrera para dedicarse a su pareja y mira la última canción. [Ríe].
¿La tecnología ha hecho que todo sea urgente? ¿Se han desdibujado los límites con un teléfono en la mano?
Hay trabajos y trabajos. Una persona que está pendiente de un delivery lo consultará a cada rato para poder llevar sus pedidos. O un periodista de actualidad. Yo soy psicólogo y tengo urgencias del tipo gente que tiene ganas de suicidarse. Esos casos me los pongo en favoritos y así me entran sus llamadas siempre, independientemente de la hora. Pero del resto apago las notificaciones y consulto el móvil tres veces al día. Hay un momento en el que se tiene que acabar.
Anima también a poner límites por escrito. Llega a afirmar incluso que el cara a cara está sobrevalorado. ¿No va en contra de la valentía? ¿Del hablando se entiende la gente?
Sé que es polémico, pero hay personas muy inseguras que no se atreven a decir ciertas cosas a la cara. Los perfiles abusivos lo saben y lo utilizan en su contra. A veces, dejar por mensaje te ahorra el drama del llanto o evita que acabes a insultos o calles si ese perfil va a ejercer violencia al marcar límites. Hay mensajes que se desvirtúan en el cara a cara. Por escrito, ahí quedan. Se pueden releer. Te generan protección, porque no hay que acercarse. Desde lejos, ahí lo dejas porque no quieres dialogar, solo informar. Es lo mejor para manipuladores o maltratadores. Muchas personas no quieren escuchar. Pienso que en el cara a cara hay más distracciones.
Pero mejor no enviar nada con el calentón, ¿no?
La escritura aporta calma y nos da perspectiva, pero hay que redactarlo bien, por supuesto. Nada de parrafadas enfadado, claro.
¿Cómo distinguir lo urgente de lo importante?
El no es súper importante. Nos permite una vida más sana. La base son las prioridades, debemos tenerlas claras. Parece muy básico, pero a veces vamos como pollo sin cabeza, sin ningún sentido y sin que esas actividades nos aporten nada. Hay que ser respetuoso con el propio tiempo y la organización de otras personas. También saber descansar. Y si tu jefe no tiene vida y quiere la reunión a la hora de las cervezas de la tarde con tus amigos, como pases por ahí, te convertirás en el mismo desgraciado que él, que no tiene vida y odia a su familia. Pero amargarse es contagioso. Si pones límites, la mitad de las urgencias no las tienes.
¿Sentimos demasiada presión por lo que piensen de nosotros?
Muchísimo. Hay que diferenciar las opiniones de los hechos. La gente puede opinar lo que quiera y tú tienes que desvincular tu autoestima de ese concepto del qué dirán. Lo importante es que tú te respetes.
Actualizado Martes, 28 febrero 2023 - 01:32
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