Foto por AP from elmundo.es
La ex candidata a la vicepresidencia inicia en Harley una gira por lugares históricos | Presentarse supondría renunciar a los ingresos millonarios actuales.
A lomos de una Harley-Davidson, acompaña de su familia y rodeada de moteros y veteranos de guerra, Sarah Palin irrumpió ayer de nuevo en la escena política, tras meses de ausencia, con su mensaje populista y patriotero.
La asistencia a una reunión anual de motociclistas en Washington de la ex gobernadora de Alaska y candidata republicana a la vicepresidencia en el 2008 abrió una gira por lugares históricos de la Costa Este de Estados Unidos. Y de inmediato desató las especulaciones sobre una posible candidatura para desbancar al demócrata Barack Obama en las presidenciales de 2012.
Palin no hizo ningún discurso. Quería estar allí como una ciudadana más. "Soy americana. No ostento ningún título, ni ningún cargo", declaró a la cadena CNN.
Pero su llegada al parking junto al Pentágono donde empezó el desfile motociclista, junto a su esposo Todd y sus hijas Bristol y Willow, monopolizó la atención de los medios de comunicación presentes en una congregación que cada año se celebra en vísperas del día de la Memoria, dedicado a recordar a los estadounidenses caídos en el campo de batalla.
Estrella mediática y política de la derecha estadounidense, Sarah Palin no ha revelado aún si se presentará a las primarias para elegir, entre los republicanos, al sucesor de Obama.
Estrella mediática y política de la derecha estadounidense, Sarah Palin no ha revelado aún si se presentará a las primarias para elegir, entre los republicanos, al sucesor de Obama.
En su contra juega el rechazo que provoca entre los votantes más centristas, que ven en ella a una política frívola, errática y radical. Otro incoveniente es que presentarse le obligaría a renunciar a los ingresos millonarios que le reportan sus apariciones en la cadena consevadora Fox News y sus discursos remunerados por todo el país.
Cultivar el suspense sobre la candidatura permite a Palin asegurarse presencia mediática e influencia política, aunque al final renuncie a concurrir.
"Es suficientemente lista para saber que cuanto más espere antes de decidirse, más visible será y más influencia tendrá", dijo a la agencia Bloomberg el republicano Dan Shchur, que aconsejó al candidato John McCain durante las presidenciales de 2008.
Palin ha indicado que se presentaría si no hay nadie más dispuesto a hacer el trabajo, es decir, si en la corriente más cristiana y populista del Partido Republicano nadie da el paso enfrente. También ha admitido que presentarse le "tienta".
Sin embargo, sus repetidos tropiezos han restado fuerza a la candidatura. El más sonado ocurrió en febrero cuando, tras el intento de asesinato en Tucson (Arizona) de la congresista demócrata Gabrielle Giffords, Palin se declaró víctima de un libelo de sangre.
El motivo de esta declaración fue que algunos medios de comunicación habían denunciado la existencia de un mapa electoral en el que Palin había situado una diana simbólica sobre Giffords, como candidata a derrotar.
Ahora Sarah Palin ha empezado a emitir signos que sugieren que se presentará. Primero fue la revelación de que los Palin se ha comprado una casa de 1,7 millones de dólares en Arizona. La casa sería una base más adecuada que la lejana Alaska para una campaña nacional.
Ahora Sarah Palin ha empezado a emitir signos que sugieren que se presentará. Primero fue la revelación de que los Palin se ha comprado una casa de 1,7 millones de dólares en Arizona. La casa sería una base más adecuada que la lejana Alaska para una campaña nacional.
Palin, además, ha ampliado su equipo de asesores políticos y ultima un documental biográfico que podría servir para lanzar la campaña.
A esto se ha añadido la gira por la Costa Este, territorio inexplorado por esta mujer que siente más cómoda en la América rural y en el Oeste que en los salones de poder de Washington y las urbes cosmpolitas como Boston o Nueva York. El itinerario exacto es un misterio.
A esto se ha añadido la gira por la Costa Este, territorio inexplorado por esta mujer que siente más cómoda en la América rural y en el Oeste que en los salones de poder de Washington y las urbes cosmpolitas como Boston o Nueva York. El itinerario exacto es un misterio.
"One Nation", se lee en el autobús que la llevará a ella y a su entorno por monumentos históricos y campos de batalla de la guerra civil.
"Es imperativo que conectemos con nuestros fundadores, nuestros patriotas, nuestros desafíos y victorias para ver adonde vamos", ha escrito Palin.
"He dicho muchas veces que América no necesita una 'transformación fundamental'", añade, en una alusión a los planes reformistas del presidente Obama que, en opinión de los más conservadores, representan una traición a los auténticos Estados Unidos. y una renuncia a defender el carácter excepcional de este país. "¡Lo que necesitamos es una restauración de lo que es bueno y fuerte y libre en América".
"He dicho muchas veces que América no necesita una 'transformación fundamental'", añade, en una alusión a los planes reformistas del presidente Obama que, en opinión de los más conservadores, representan una traición a los auténticos Estados Unidos. y una renuncia a defender el carácter excepcional de este país. "¡Lo que necesitamos es una restauración de lo que es bueno y fuerte y libre en América".
Un hueco para una candidatura del Tea Party
La irrupción de Sarah Palin en la contienda electoral ocurre justo cuando las primarias republicanas toman forma. Los principales aspirantes han oficializado su candidatura o están a punto de hacerlo como es el caso del ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney. Un sondeo sitúa a Romney primero con un 17% de votos republicanos, y a Palin segunda con un 15%. Las asambleas electivas y primarias deben empezar a celebrarse el próximo febrero. Las presidenciales son en noviembre de 2012.
Ninguno de los aspirantes galvaniza a las bases republicanas como lo hacía Barack Obama hace cuatro años entre los demócratas. Incluso Hillary Clinton despertaba más emociones entre sus bases que los Romney, Pawlenty o Huntsman, nombres que para millones de estadounidenses resultan lejanos.
Algunos conservadores albergan la esperanza de que en el último minuto aparezca un salvador que pueda batir a Obama.
¿Quién? Suena el gobernador de Texas, Rick Perry, que dice que se lo pensará. O el congresista de Wisconsin Paul Ryan, autor del controvertido plan para recortar la sanidad pública para los mayores de 65 años y uno de los ideólogos más audaces de la derecha estadounidense.
Tras la retirada del ex pastor evangélico Mike Huckabee, se ha abierto un hueco para un aspirante populista que plante cara a figuras del establishment como Mitt Romney. El movimiento Tea Party, que catapultó a los republicanos en las legislativas de noviembre, carece de candidato.
Aquí podría entrar en juego la congresista de Minesota Michelle Bachmann, líder del Tea Party en el Congreso. O la misma Palin, que además de ser referente del Tea Party también aporta un carisma y un tirón mediático que ningún otro republicano tiene.
Aquí podría entrar en juego la congresista de Minesota Michelle Bachmann, líder del Tea Party en el Congreso. O la misma Palin, que además de ser referente del Tea Party también aporta un carisma y un tirón mediático que ningún otro republicano tiene.
Por Marc Bassets | Washington from lavanguardia.com 30/05/2011
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