miércoles, 1 de octubre de 2025

No, tu móvil no te está escuchando, es algo mucho peor: "Mucho más siniestro que un micrófono abierto"



Imagen generada con IA



El problema no está en el micrófono de tu móvil, sino en los perfiles invisibles que las empresas crean con tu actividad digital. Eso sí pone en riesgo tu privacidad y tus datos personales.




Durante años se ha repetido la misma sospecha cuando hablas de un tema con alguien y, poco después, aparece un anuncio relacionado en tu móvil. La sensación de que el dispositivo está escuchando resulta difícil de ignorar, pero lo cierto es que no hay pruebas que sostengan esa teoría.

Ni Apple, ni Google, ni Meta han sido cazados grabando conversaciones de forma encubierta para alimentar su maquinaria publicitaria, lo que ocurre es, en realidad, más inquietante. No se activa el micrófono de tu smartphone, sino de un sistema basado en datos, perfiles y algoritmos que predicen tu comportamiento con un nivel de detalle que puede resultar incluso más intrusivo de lo que imaginas.

La publicidad digital no necesita espiar lo que dices debido a que funciona analizando lo que haces. Tus búsquedas en internet, la ubicación que comparte tu móvil, los artículos que compras, los vídeos que ves o las apps que usas se convierten en señales que alimentan un ecosistema publicitario capaz de decidir qué anuncio mostrarte y en qué momento exacto.

De ahí que la coincidencia con una conversación resulte tan convincente, en realidad no te han escuchado, han conectado tus hábitos digitales con las de millones de personas y han deducido que ese era el instante en el que el anuncio publicitario tenía más posibilidades de impactarte.


Cómo se determina qué anuncio ves en tu móvil

Cada vez que entras en Instagram, YouTube, TikTok o cualquier otra plataforma, tu actividad se traduce en información que sirve para ejecutar subastas de anuncios en milisegundos. La plataforma observa tus movimientos dentro de la app, desde lo que sigues hasta el tiempo que pasas en cada publicación.

Al mismo tiempo, los anunciantes participan aportando sus campañas, presupuestos y, en muchos casos, listas encriptadas de clientes que ya conocen. Esas listas permiten buscar coincidencias y, a partir de ellas, generar audiencias similares.

Pero el engranaje no termina ahí, ya que los llamados proveedores de identidad se encargan de unir diferentes dispositivos que probablemente pertenecen a la misma persona o al mismo hogar, de manera que lo que haces en tu portátil pueda tener efecto en los anuncios que aparecen en tu móvil o en tu televisor.

Son empresas que recolectan y venden audiencias empaquetadas en función de hábitos de compra, patrones de navegación, programas de fidelidad o registros en tiendas físicas. Con todo ello se genera un perfil que, aunque no lleve tu nombre, actúa como si te conociera mejor de lo que imaginas.


Por qué parece que tu móvil escucha

La sensación de que tu móvil te espía no viene del micrófono, sino de cómo percibes los anuncios. Cuando una publicidad encaja de forma sospechosa con algo que acabas de comentar, tu cerebro retiene esa coincidencia y descarta las decenas de impactos irrelevantes que has visto antes.

Es lo que se conoce como ilusión de frecuencia y sesgo de confirmación. A esto se suma el momento en que llegan los anuncios, los algoritmos concentran los presupuestos publicitarios en franjas concretas o en contextos donde la probabilidad de éxito es mayor.

Eso explica que un anuncio pueda aparecer justo después de una conversación, y no es que tu móvil te escuche, sino que ya estabas en el punto de mira y el sistema eligió ese momento porque estadísticamente era el más eficaz. En resumen, no oye tu charla, lee tus hábitos.


Cómo reducir tu rastro sin vivir desconectado

No es posible desaparecer por completo del radar, pero sí puedes reducir el alcance de tu huella digital. Revisa los permisos de tus apps con frecuencia y limita la ubicación a "solo cuando se use la app". Cuando sea posible, activa la ubicación aproximada en lugar de la exacta.

Del mismo modo, elimina las apps que ya no utilizas y evita conceder acceso a contactos, cámara o micrófono si no es imprescindible. En el navegador, instala bloqueadores de rastreo como uBlock Origin y Privacy Badger, que dificultan la acción de los rastreadores invisibles.

En redes sociales, usa la opción "¿Por qué veo este anuncio?", y ajusta tus preferencias para reducir la presión. Si la legislación de tu país lo permite, ejerce tus derechos de acceso o borrado de datos. Y, si prefieres externalizarlo, existen servicios de opt-out que tramitan la salida de corredores de datos en tu nombre, aunque es un proceso que hay que repetir porque las bases se regeneran.

Cuantas menos aplicaciones uses, menos rastreadores tendrán acceso a tu información. Y cuantos menos permisos concedas, más difícil será que tu perfil se alimente de detalles innecesarios. Se trata de usar la tecnología con un mayor control sobre lo que compartes.



Juan Manuel Delgado
27 sep. 2025 13:00h.
https://computerhoy.20minutos.es/ciberseguridad/no-movil-no-te-escuchando-algo-mucho-peor-mucho-siniestro-microfono-abierto-1482572